La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, anunció ayer a la Federación de Asociaciones de Diabéticos de Andalucía (FADA) que la Consejería de Salud va a incorporar al sistema público dos nuevos tratamientos que permitirán mejorar la vida de más de 5.000 personas afectadas por esta enfermedad en la comunidad autónoma. Según explicó en una comparecencia en el Palacio de San Telmo tras reunirse con representantes de la federación junto a la consejera de Salud, Marina Álvarez, los dos nuevos tratamientos que van a incorporar el Servicio Andaluz de Salud (SAS) son el denominado sistema Flash, un dispositivo que evita pinchazos en menores diabéticos y que se incluirá de forma inmediata, y la bomba sensor para pacientes con diabetes, cuya incorporación se hará de manera progresiva.

En concreto, el sistema Flash, que se implanta bajo la piel del brazo de niños de 4 a 18 años, beneficiará a 3.500 menores andaluces que podrán evitar hasta ocho pinchazos diarios para medir la glucosa, mientras que la bomba sensor alcanzará al 30 por ciento de los pacientes que tienen actualmente bomba de insulina.

Durante su intervención, explicó que en las últimas semanas se han mantenido conversaciones con muchas familias con niños y adolescentes con diabetes que venían reclamando mejoras y que han considerado «dar un paso más para mejorar la calidad de vida de los mismos» con la incorporación inmediata del sistema Flash. Además, añadió que «se ha demostrado efectivo a partir de los cuatro años», aunque, «si en un momento se avanza y se demuestra que clínicamente vendría bien en niños menores de cuatro años», se incorporará a los mismos.

Por su parte, la consejera de Salud explicó que en el caso del sistema bomba sensor «la implantación es a partir de ya para pacientes que no se controlan adecuadamente con el sistema de bomba tradicional». Así, este sistema mide continuamente el nivel de glucosa, mejora el control de la glucemia y reduce las bajadas graves de azúcar en pacientes que ya portan bomba de insulina. «Esto va a beneficiar a niños y adultos, muy vulnerables desde un punto de vista de salud», recalcó Álvarez.

La implantación se realizará de manera progresiva ya que requiere formación previa de los pacientes, además de asegurar la selección que realice cada equipo médico. El SAS hará un seguimiento de cada sistema para comprobar que se están cumpliendo las expectativas puestas en estas dos innovaciones, y también se iniciarán estudios de investigación para contribuir a aumentar el conocimiento de estos dispositivos a nivel nacional e internacional. Gracias al abordaje de la diabetes en Andalucía, la mortalidad por esta enfermedad se ha reducido de forma progresiva.