­Con motivo de la celebración del Día de la la Memoria Histórica, la Junta de Andalucía destacó la necesidad de que se lleven a las aulas episodios históricos como el genocidio acaecido en Málaga de «La Desbandá», uno de los episodios más cruentos de la Guerra Civil española que tuvo lugar tras la entrada en Málaga de las tropas franquistas y que condujo a una verdadera masacre entre la multitud de civiles que huían camino de Almería bajo el acoso de las bombas de los sublevados. Así, en Granada, se inauguró ayer una muestra gráfica de este suceso para celebrar el Día de la Memoria Histórica.

«Tenemos una deuda que entendemos que es de justicia y de ética democrática», expresó Sandra García, delegada del Gobierno andaluz en Granada, que recalcó además la obligación de ofrecer una visión de la historia reciente «basada en los principios de verdad, justicia y reparación, así como en los valores democráticos de concordia, convivencia, pluralismo, defensa de los derechos humanos, cultura de paz e igualdad». De este modo, García defendió la necesidad de llevar a las aulas la divulgación rigurosa de acontecimientos históricos asociados a la República, al golpe de estado militar, a la guerra civil y al franquismo y pidió hacerlo sin obviar la realidad tras años con el testimonio exclusivo de los vencedores.

Desde Málaga, la delegada territorial de Educación, Patricia Alba, «con esta conmemoración se pretende promover el conocimiento y la reflexión entre los estudiantes, en torno al periodo que abarca desde la Segunda República, la Guerra Civil, la Dictadura franquista y la transición a la democracia hasta la entrada en vigor del primer Estatuto de Autonomía para Andalucía».En especial, recalcó que «se trata de impulsar merecidos actos de reconocimiento y homenaje a las víctimas del golpe militar de 1936 y la Dictadura, con el objeto de mantener su memoria y reivindicar los valores democráticos y la lucha del pueblo andaluz por sus libertades».