Los cuatro candidatos propusieron medidas para crear empleo de calidad y bajar los impuestos para conseguir reducir la tasa del paro, del 22,85%, la más alta del país.
De este modo, Susana Díaz, que dijo presentarse a la reelección «con los deberes hechos», defendió la bajada del paro en 560.000 personas bajo su mandato y anunció que en la próxima legislatura prevé un descenso en nueve puntos más.
Moreno, por su parte, anunció una «bajada masiva de impuestos» igual que en las comunidades que más crecen, como Madrid, que permita acabar con el «drama» del paro en una comunidad que definió como «un gran fórmula uno» pero que no está bien gestionada, y se comprometió a crear 600.000 empleos.
La candidata de Adelante reprochó a la líder socialista su actitud «triunfalista» porque la riqueza «no ha entrado en las casas de los andaluces», y propuso subir los salarios, lo que permitiría más capacidad de consumo y crecimiento.
Marín, que respaldó al Gobierno de Díaz en la última legislatura, destacó que con solo nueve escaños han hecho que bajen los impuestos en Andalucía por primera vez, y criticó que el PP, en 40 años, no ha conseguido nada. El líder de Cs no quiso hacer promesas de creación de empleo sino potenciar las condiciones para que lo creen los empresarios, y lamentó que los jóvenes trabajan 12 y 14 horas y «no llegan a fin de mes».
