­Victoria contundente del PSOE en Andalucía y naufragio absoluto del PP, en línea con los resultados cosechados por las dos grandes formaciones tradicionales. a nivel nacional. Los socialistas han recuperado a nivel andaluz el liderazgo en el voto que perdieron en las anteriores elecciones (pasan de 20 a 24 diputados) mientras que los populares sufren una verdadera debacle y pierden más de la mitad de sus escaños (bajan de 23 a 11).

Los otros triunfadores de los comicios a nivel regional son Ciudadanos, que sube de 7 a 11 diputados (adelanta al PP en votos y se sitúa como segunda fuerza con más sufragios), y Vox, que irrumpe en escena con 6. Por su parte, la coalición Unidas Podemos-IU ve reducidos sus votos y se queda con 9 diputados, dos menos que en los anteriores comicios.

El revés es muy duro para el secretario general del PP regional, Juanma Moreno, que pese a presidir desde el pasado mes de enero la Junta de Andalucía, no ha conseguido evitar ahora el desplome de los apoyos a su partido en la comunidad y bajo el liderazgo nacional de Pablo Casado sufre un severo castigo en las urnas. Si en las últimas generales de hace tres años, Moreno logró un tercio de los votos emitidos (33,50%) y se apuntó su primera victoria electoral como líder del PP regional, ahora el porcentaje ha caído al 17,18%. De los 1,4 millones de votos que logró en 2016, la cifra ha bajado a algo más de 784.000.

La cara opuesta es el PSOE, donde la presencia de Pedro Sánchez en la Moncloa durante los últimos diez meses parece haber revitalizado a una formación que, no obstante, viene de sufrir a inicios de año la histórica pérdida de la presidencia de la Junta por parte de Susana Díaz. En estas elecciones generales, los socialistas han ganado en las ocho provincias andaluzas, cuando hace tres años sólo lo hicieron en tres (Huelva, Jaén y Sevilla) y el PP en las otras cinco. El PSOE logra el 34,23% de los votos (alrededor de 1,56 millones, frente a los 1,32 de las elecciones generales precedentes).

Del resto de formaciones, destaca por un lado el ascenso de Ciudadanos, que pasa del 13,6% de los votos en 2016 a alcanzar el 17,7% en esta ocasión (sube de 578.000 votos a unos 808.000). El partido de Albert Rivera, que gana cuatro diputados en la comunidad, adelanta incluso al PP en votos, desplazándolo al tercer puesto. Ciudadanos ve así cómo Andalucía contribuye de forma significativa al gran avance registrado en estas elecciones, donde ha sumado 25 escaños más en toda España en relación a las anteriores generales.

En cuanto a Vox, la formación liderada por Santiago Abascal ha confirmado los pronósticos y ha irrumpido con fuerza en el tablero político nacional. En el caso de Andalucía, Vox obtiene seis diputados tras obtener el 13,37% de los apoyos (más de 610.000 votos). Al igual que ocurrió en las pasadas elecciones andaluzas, la formación de ultraderecha logra un ascenso meteórico. Basta recordar que en las elecciones generales de 2016 tan sólo obtuvo 8.341 sufragios.

Unidas Podemos, por su parte, retrocede del 18,6% al 14,2% de los apoyos y obtiene más de 650.000 votos, cuando hace tres años logró 792.000. La confluencia de la formación de Pablo Casado con la IU de Alberto Garzón sigue sin dar los resultados apetecidos, ni en Andalucía ni en España.

La participación en estas elecciones en Andalucía ha sido del 73,30%, más de siete puntos por encima del 66,05% registrado en junio de 2016.