El consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, cerró filas en cuanto al nombramiento de María Dolores Moreno Bonilla, hermana del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, como directora del Conservatorio Superior de Danza Ángel Pericet de Málaga pese a que otra aspirante, Esperanza Utrera, obtuvo una puntuación muy superior (49,50 sobre 50) en la convocatoria pública para cubrir el puesto, vacante debido a la jubilación de José Gutiérrez Morales, al frente del centro hasta el 13 de junio.

«Los tiempos en los que la gente entraba a trabajar en la Junta de Andalucía por la puerta de atrás se acabaron con este gobierno, la única forma de entrar es por igualdad, mérito y capacidad, como marca la ley», aseveró Bendodo.

Pese a que Esperanza Utrera consiguió la mayor puntuación de las cinco aspirantes al cargo, finalmente el puesto fue adjudicado a María Dolores Moreno, según el consejero, debido a que Utrera fue cesada como directora del centro hace unos años. «Los funcionarios mismos desaconsejaron que se volviera a contratar a la persona que ya tuvo que ser cesada. La siguiente en la lista era una funcionaria que lleva 14 años de experiencia, que tiene cuatro carreras, que es una gran profesional y que es la hermana del presidente, pero tiene el mismo derecho que cualquier ciudadano», explicó Bendodo. «Quiero garantizarles que el proceso se ha hecho con absoluta pulcritud, dentro de la normativa al 100%». Asimismo, aclaró que en estos casos la normativa no requiere un procedimiento o un concurso para la elección del cargo sino que puede llevarse a cabo un nombramiento directo, y que, si se convocó el concurso, fue para ofrecer una «mayor transparencia».

Por su parte, la catedrática de Música y Artes Escénicas en el Conservatorio y una de las candidatas de la convocatoria, Mónica Romero, aseguró a este periódico que Esperanza Utrera no fue cesada de su cargo sino que renunció «por diferentes motivos».

«Lo raro es que hasta el último momento no sacaron el concurso. En tres días lo querían solucionar todo, con hermetismo total», declaró Mónica Romero, que a mediados de julio presentó una reclamación a la delegada de Educación exigiendo la publicación de los méritos.

Por su parte, el portavoz adjunto, Rodrigo Sánchez Haro, exigió al presidente que dé explicaciones de lo que considera que podría tratarse de un caso de «nepotismo», y le reprochó que «las primeras palabras que dijo cuando llegó a la Presidencia fueron que se había acabado el enchufismo en la Junta».