El PP y Ciudadanos han reafirmado este lunes su alianza en la Junta de Andalucía pese a la debacle de la formación naranja en las elecciones del domingo, mientras Vox, que se sitúa ahora como la tercera fuerza política, ha garantizado que será "leal" con sus compromisos como socio externo del gobierno bipartito.

Pocas horas después de conocerse los resultados de las elecciones generales en Andalucía, donde el PSOE ha vuelto a ganar -en esta ocasión con un escaño más respecto a los comicios de abril- y el bloque de la izquierda supera en un escaño al de la derecha; PP, Ciudadanos y Vox han querido despejar cualquier duda sobre la duración de la legislatura.

La secretaria general del PP-A, Dolores López, ha subrayado este lunes que a pesar de tener a Vox a una diferencia de 7.000 votos, el Partido Popular se sitúa "claramente" en segunda posición en la comunidad, donde "toca seguir trabajando con ilusión y poner el interés general de los andaluces por encima de cualquier ideología política".

La dirigente popular ha considerado que el resultado no va a afectar al Gobierno andaluz porque las elecciones "no son extrapolables" y porque el gabinete "está asentado y funcionando".

Además, ha defendido que el andaluz es el único Ejecutivo que "tiene estabilidad y unos segundos presupuestos aprobados", y ha dicho que tanto Ciudadanos como Vox "saben que eso es lo que necesita Andalucía".

Por parte de Ciudadanos, la consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Rocío Blanco, ha negado "rotundamente" que los resultados electorales vayan a afectar al Gobierno andaluz y ha subrayado que el Ejecutivo autonómico está "muy unido y tremendamente cohesionado".

En la misma línea, el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre (PP), ha dicho que Andalucía "ha hecho sus deberes" y tiene asegurada la gobernabilidad para los próximos años y ha añadido que el pacto "a la andaluza" es un modelo que "funciona perfectamente".

En cuanto a Vox, el diputado Manuel Gavira ha dicho que su partido es "leal" y "responsable" con los acuerdos con el Gobierno andaluz y ha asegurado que no van a "mezclar los escenarios" nacional y regional tras las elecciones generales.

Asimismo, tras recordar que Vox no forma parte del Ejecutivo, ha señalado que su partido es "leal y responsable" y "mira por el interés de Andalucía", y sobre la posibilidad de que vayan a exigir más al Gobierno tras quedarse a menos de 7.000 votos del PP y superar ampliamente a Ciudadanos, ha insistido en que no van a "mezclar escenarios: el nacional es uno y el autonómico es otro".

Por su parte, el PSOE andaluz ha eludido pronunciarse sobre si la actual legislatura podría finalizar antes de tiempo, aunque su secretario de Organización, Juan Cornejo, ha subrayado que los dos partidos de gobierno han tenido "unos resultados de fracaso".

"No sólo ya Vox se ha comido a Ciudadanos, sino que se va a comer al Partido Popular y será nuestro adversario político al paso que va", ha vaticinado el dirigente socialista, que de los resultados de las elecciones generales en Andalucía ha extraído también como conclusión que la secretaria general del partido, Susana Díaz, ha salido "reforzada".

Desde Podemos Andalucía, formación que ha cosechado en la comunidad un nuevo resultado adverso al conseguir tan solo seis diputados, tres menos que en abril, el secretario Político y de Comunicación, Pablo Pérez Ganfornina, ha sostenido que primero las políticas "neoliberales" del PSOE-A de Susana Díaz y después la decisión de Pedro Sánchez de convocar elecciones han "dado alas" al eminente crecimiento de Vox.

A su juicio, hay que esperar para ver cómo afecta la crisis del partido naranja al Gobierno andaluz bipartito del PP y Ciudadanos, aunque ha denunciado que ambas formaciones han "normalizado y homologado" a Vox al convertirlo en socio de investidura y de los presupuestos andaluces.