El consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo, insistió ayer en la necesidad de que «se evite cualquier encuentro social, cualquier reunión o cualquier visita que no sea necesaria».
«No vale que, como cierran los bares y restaurantes a las seis de la tarde, nos vayamos a tomar una copa a casa de un amigo esa misma tarde; hay que limitar al máximo la interacción, hay que hacer ese sacrificio por los trabajadores sanitarios y por nuestros familiares, si se supiera el porcentaje de padres que hay en la UCI contagiados por sus hijos se pensaría más en esto de la movilidad», recalcó.
Bendodo dejó claro que «ahora tenemos que frenar la curva» y dentro de 15 días se volverán a valorar las medidas a aplicar atendiendo a la evolución que experimente hasta entonces la pandemia. «Estamos trabajando para que se puedan volver a hacer todas esas cosas que ahora no podemos», señaló Bendodo.
En este punto, el consejero reclamó que las medidas «duras» que se han puesto en marcha sean entendidas en el contexto que ha provocado la evolución negativa de la pandemia en la comunidad.
Bendodo reiteró que «tenemos que ir todos a una, pues ninguna restricción servirá para nada si no acatamos las normas y, si la curva baja, podremos flexibilizar las medidas pero, si sigue la escalada, el objetivo de este Gobierno andaluz será salvar vidas y salvar la economía».
«Es un momento difícil porque esta ola es muy agresiva y está actuando con gran rapidez con el consiguiente aumento de la presión hospitalaria, que es lo que nos preocupa actualmente», agregó Bendodo.
El portavoz de la Junta detalló que el 80% de los contagios se producen ahora en el ámbito familiar y que se han contabilizado 26.931 contagios de menores de 35 años, por lo que recordó a los jóvenes que se puedan sentir fuertes y pasar el virus de forma asintomática que «puede que su padre o su abuelo no lo pasen así».
Asimismo, el consejero le pidió al Gobierno central que «dé un paso al frente y no se oculte delegando las competencias en una situación de emergencia sanitaria como esta».
«Ante un problema de Estado tiene que haber una respuesta de Estado; al Gobierno de Andalucía no le va a temblar el pulso articulando medidas para salvar vidas, pero como país damos muy mala imagen con 17 estrategias distintas y sin una estrategia común que, como han hecho todos los socios europeos, debería liderar el Gobierno de España», enfatizó Bendodo.
Medidas de rescate
En este punto, el consejero manifestó que la Junta dará «un paso al frente a la hora de adoptar medidas de rescate para afrontar las consecuencias sobre los sectores económicos de las nuevas restricciones que se han tenido que adoptar para frenar los contagios de coronavirus en esta comunidad autónoma».
«Este Gobierno no lo puede hacer todo solo, y vamos a pedir que el Gobierno central tiene también que dar un paso al frente, porque estamos en una emergencia nacional y en una crisis sanitaria, económica y social; el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, trata de pasar las competencias a otros para no quemarse», enfatizó.
En clave política, el consejero también dijo que «la gravedad del momento nos obliga a ir todos a una». «La ideología tiene que ser residual y hay que anteponer los intereses de Andalucía y sus ciudadanos», reclamó el consejero con un mensaje que no perdió de vista la necesidad de aprobar los presupuestos andaluces para 2021 con el apoyo de otras fuerzas políticas.
«Las unanimidades son complicadas, pero sería positivo lazar a la ciudadanía el mensaje de que el Presupuesto de Andalucía para 2021 se ha aprobado sin votos en contra; tendemos la mano a todos los grupos, aunque la intención es seguir contando con el principal apoyo del socio parlamentario de Vox», subrayó.
