Política

Juanma Moreno, un marengo bajo la tempestad de febrero

El presidente andaluz es homenajeado, con la imposición de un escapulario, por la Hermandad de la Virgen del Carmen de Torremolinos

Moreno, con el escapulario de la Virgen del Carmen de Torremolinos.

Moreno, con el escapulario de la Virgen del Carmen de Torremolinos. / Junta de Andalucía

Cristóbal G. Montilla

Cristóbal G. Montilla

Cerca de la Sansueña que anheló el poeta Luis Cernuda, la rutina felina y los senos tostados de la escultura de Gala Eluard sostenían bajo el fuerte viento el panorama habitual. Al llegar a La Carihuela, el vuelo multiplicado de las gaviotas parecía el cartel que anunciaba un ritual cercano. Y en la plaza del Remo, penúltimo suspiro de cierta milla de oro del pescaíto, alguien refería que el retraso del presidente de la Junta de Andalucía estaba motivado por la caída de un árbol en la carretera por la que se desplazaba desde Ronda a Torremolinos. El mar, como la actualidad política actual, tampoco estaba en calma. Y en esas, Juanma Moreno se empeñó en ponerle al mal tiempo buena cara. Incluso, se metió en el interior de una peluquería de la zona para departir con las empleadas que lo habían reclamado. Llegó a ser un marengo encorbatado bajo la tempestad de febrero. Sobre todo, cuando en la parroquia de Nuestra Señora del Carmen, la hermandad de la reina de la inmensidad marina le impuso su escapulario. Y, de esta guisa, el barón andaluz del PP sumó una estampa más al book de fotos que tanto le reprocha el socialista Juan Espadas. 

"Espero que la Virgen del Carmen nos ilumine y podamos acertar en las decisiones que todos los días tomamos para el conjunto de los ciudadanos de Andalucía"

Ni siquiera la tímida lluvia impedió el previsible baño de cariño que aguardaba al presidente andaluz en la zona comercial que pilla de camino, en esa especie de pueblo con mar que es La Carihuela, hacia la parroquia de la Virgen del Carmen. El dependiente con rasgos árabes de una tienda de complementos llegó a besar la chaqueta de Juanma Moreno y a gritarle sendos 'Viva España' y 'Viva Andalucía', a los que el presidente respondió con otro improvisado "Viva".

Tras ser distinguido con el escapulario de la Hermandad de la Virgen del Carmen de Torremolinos, desde el altar de la parroquia Juanma Moreno agradeció el reconocimiento y garantizo qué su Ejecutivo andaluz seguirá trabajando para que "las tradiciones profundicen aún más en nuestras raíces".

"Espero que la Virgen del Carmen nos ilumine y podamos acertar en las decisiones que todos los días tomamos para el conjunto de los ciudadanos de Andalucia", añadió el presidente de la Junta. 

Con la concesión de este escapulario, la hermandad de La Carihuela agradece que la Junta haya reconocido la singularidad de la procesión torremolinense de la Virgen del Carmen con la declaración de interés turístico.

Torremolinos, "capital de muchas cosas"

En una intervención posterior, que tuvo que trasladarse al interior de un chiringuito por el mal tiempo, Juanma Moreno reivindicó a Torremolinos como una ciudad que "fue capital de muchas cosas" y puede "generar más empleo, bienestar y riqueza para sus vecinos" de la mano de la alcaldesa del PP, Margarita del Cid, quien agradeció que el presidente "siempre" esté a disposición de la localidad malagueña.

Juanma Moreno se definió a si mismo como "un municipalista convencido" y dijo que tanto Margarita del Cid como el resto de alcaldes y alcaldesas de Andalucía "tienen la mano tendida" del Gobierno autonómico. 

"Concibo una relación sin sectarismos con todas las administraciones locales de la comunidad autónoma", añadió el presidente andaluz.