ANDALUCÍA

Una ‘influencer’ explica el origen de una conocida expresión andaluza y las redes arden: “Me acabo de enterar…”

Cientos de personas se han pronunciado sobre este dicho que se remonta al sigo XV

Las redes arden con la explicación de una de las expresiones más reconocidas de Andalucía.

Las redes arden con la explicación de una de las expresiones más reconocidas de Andalucía. / EP

Sarai Bausán García

Sarai Bausán García

Andalucía está llena de historias, costumbres y refranes que acompañan a sus ciudadanos durante generaciones y pasan de padres a hijos hasta formar una de las mayores riquezas intangibles del territorio. Así, se convierten en una parte tan intrínseca del imaginario colectivo que sus orígenes e inicios se desdibujan y pasan a ser completos desconocidos. Es lo que ocurre con la expresión más utilizada en la provincia de Jaén 'Ni poyas', que ha pasado a ser una parte imprescindible de la lengua de la que pocos saben su procedencia.

Para arrojar luz sobre este término, la creadora de contenido jiennense Desirée Lara ha utilizado el altavoz que supone su perfil 'desslara', en el que acumula miles de seguidores, para explicar que se trata de una expresión que empezó a usarse en Jaén en el siglo XV. "Si eres de Jaén, sí o sí has escuchado la expresión 'ni poyas', así que hoy vamos a ver de dónde viene. Lo primero que hay que tener claro es que no tiene nada que ver con lo que tenéis en mente", ha relatado la joven.

Tal y como ha indicado, en el siglo XV las familias solían hacer sus propios panes en casa pero, como no todos ellos tenían horno propio, la mayoría hacían uso de hornos comunes para cocinar su pan. "Ya sabemos que en la vida nadie te regala nada, y estos hornos no iban a ser menos, así que tenían que pagar un pequeño impuesto para poder usarlos, que se llamaba poya, que era básicamente el trozo de masa que les cabía en una mano y que luego servía para hornearlo y venderlo con el nombre de pan de poya", ha señalado.

Hasta el momento, cada 'poya' era diferente, en función del tamaño de la palma de la persona que la realizara. Sin embargo, todo cambió cuando uno de los panaderos encargados de estos hornos, cansado de que la gente cada vez le cortara las 'poyas' más pequeñas, impuso que desde ese mismo momento, todas las masas iban a ser del mismo tamaño, el de su mano.

"Precisamente no era pequeña, así que ya os podéis imaginar los trozos de masa que se quedaba", ha afirmado la jiennense. Además, ha añadido: "Esto a la gente no le hizo mucha gracia, pero como el horno les pillaba cerca y el hombre les caía simpático, se acabaron conformando".

El origen de la expresión de Jaén 'Ni poyas', en una panadería

Pero el mayor recorrido de este término no llegó hasta tiempo más tarde, cuando una mujer acudió al establecimiento de este panadero para comprarle pan, pero ya no le quedaba nada para venderle. "La mujer, ya desesperada, le dijo '¿ni poyas te quedan?'. Esto hizo mucha gracia y se acabó extendiendo hasta día de hoy, que cuando nos preguntan que de dónde somos, decimos muy orgullosos que somos de Jaén, ni poyas", ha indicado.

Una historia que ha despertado el interés de cientos de ciudadanos, que han mostrado su sorpresa por el origen de esta expresión, de la que había oído hablar pero desconocían sus inicios. "Mi familia es toda de Jaén y usan esa expresión y no sabía de dónde venía", ha señalado un usuario. A lo que añade otra: "44 años tengo y me acabo de enterar...".

"¿Por qué los de Jaén tenéis tanto arte y gracia?", ha destacado otro, a lo que distintos usuarios han asegurado que esta expresión, en realidad, radica de la provincia de Granada. "Yo soy de Granada y paso mucho por Jaén, y confirmo que se usa muchísimo más esa expresión en Jaén que en Granada", relata un ciudadano para poner fin a la polémica.

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