Como una pelea en el patio de un colegio, que se ha ido agravando con el tiempo. Los desencuentros entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Benamocarra acerca del instituto La Maroma de la localidad han sido tan constantes como dispares. Y todo ello para perjuicio de los casi 200 alumnos de Benamocarra, Iznate, Almáchar y El Borge que están matriculados en el centro.

El primer problema fue la designación de Manuel Ruiz Cazorla como director del centro educativo en 2008 que, precisamente, era en aquel momento concejal y portavoz del PSOE en el Ayuntamiento. El alcalde, Abdeslam Lucena (en aquel momento por el PA y ahora en el PP), afirmó que hubo «irregularidades» en el proceso de selección por parte de Educación, denunciando al socialista y a los responsables de la delegación provincial.

El asunto trascendió más allá de la vía judicial: se instalaron dos vallas frente al centro educativo en las que rezaban «El delegado de Educación enchufa al director del instituto. No a la politización de la educación de nuestros niños» y «El director del instituto, enchufado por el delegado de Educación. La política llega a las aulas. No con nuestros hijos».

El juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Vélez Málaga ordenó en enero de 2009 al Ayuntamiento de Benamocarra que retirase las vallas que había colocado en un plazo de quince días. Sin embargo, el retraso en acatar la medida motivó una nueva denuncia, por el cual el Ministerio Fiscal solicita nueve meses de prisión por un presunto delito de desobediencia civil.

Los desencuentros entre Ruiz y Lucena fueron continuos en ese periodo. La licencia de apertura del instituto ha sido el principal motivo. Ruiz asegura que el Consistorio se ha negado a dar la licencia por un enfrentamiento personal, mientras que Lucena mantiene que no se les permite entrar a los técnicos municipales para comprobar el estado del edificio que, según él, presenta una serie de deficiencias estructurales.

En noviembre de 2010, Ruiz Cazorla presentó su dimisión como portavoz del PSOE, señalando que con esta decisión se acabaría el «bloqueo municipal» al instituto, que permanecía enganchado a la luz de obra y con problemas en un muro de escolleras, para el cual solicitaba una licencia de obras con el fin de acometer su mejora. Pero más de un año después, todo sigue igual.

El pasado 2011 también ha sido movido para el instituto. La compañía Endesa remitió un escrito anunciando que cortaría el suministro eléctrico para el presente curso, aunque finalmente se acordó una prórroga en el servicio; y más de doscientos padres se manifestaron por las calles del pueblo exigiendo que se solvente el problema de la licencia de apertura y se acometan los arreglos necesarios para garantizar la seguridad.

El pasado mes de diciembre, Infraestructuras y Servicios Educativos inició unas obras de emergencia en el muro de escollera que fueron paralizadas en el acto por decreto municipal. Días después se precintó el instituto. Un juez ha ordenado esta semana su levantamiento.