La coalición política Izquierda Unida va a registrar en el Congreso una proposición no de ley para que se suspenda la aplicación del Reglamento Europeo sobre medidas técnicas del Mediterráneo en Málaga. Esta normativa fija un torzal más fino en las redes pasando de cinco a tres milímetros, lo que está reduciendo considerablemente el volumen de capturas de los barcos de arrastre del puerto de Caleta de Vélez, uno de los más importantes de la provincia.

Así lo señaló la parlamentaria andaluza Lola Quintana, tras mantener un encuentro con el patrón mayor de la cofradía de pescadores veleña, José Luis Guerrero. Quintana resaltó «que el empleo de estas mallas hace que se reduzcan las capturas en un 60%. Málaga cuenta con 50 barcos de arrastre, de los que 20 están en Caleta de Vélez, empleando a un total de 200 marineros». Es por ello que el diputado de la formación política Alberto Garzón hará la correspondiente propuesta en la Comisión de Pesca.

«El acoso y derribo que está haciendo el Partido Popular no es justo ya que los pescadores quieren cumplir con la normativa, pero acorde a las características de este caladero», apuntó Quintana, «a lo que se suma además la decisión de iniciar las prospecciones de gas frente a las costas de Nerja y Torrox».

«No entendemos que se mande a la Armada para sancionar a los barcos y nos parece un completo atropello hacia los pescadores de Caleta de Vélez», señaló el concejal de IU en el Ayuntamiento, Salvador Marín. «La actitud del Gobierno está condenando al sector a su desaparición y que tengan que llevar las embarcaciones al desguace, lo que supondrá un aumento de las cifras del paro».