Tan sólo uno de los 25 chiringuitos de las playas de los núcleos de Torre del Mar, Benajarafe y Caleta de Vélez se ajusta a los límites establecidos por la normativa vigente, que establece que no deben superar los 150 metros cuadrados de superficie máxima, con 30 metros cuadrados para los aseos.

El dato resulta de las mediciones efectuadas por los técnicos de la Delegación de la Consejería de Medio Ambiente, que ha advertido de las consecuencias de mantener el exceso de metros cuadrados que marca la normativa.

Así se lo ha advertido al Consistorio de la capital axárquica, en una reunión mantenida ayer entre representantes municipales y el director general de Prevención, Calidad Ambiental y Cambio Climático de la Junta de Andalucía, Jesús Nieto, quien insistió en que los establecimientos incumplen con la ley de ocupación vigente.

A aquellos establecimientos que no retiren el mobiliario que está fuera de lo autorizado, se les podría revocar la concesión administrativa, además de imponerles una sanción económica.

El concejal de Playas de Vélez Málaga, Emilio Martín (PP), explicó que en varias reuniones mantenidas meses atrás con los propietarios de estos negocios les han informado de la estricta aplicación de la ley y de que Medio Ambiente ha alertado al Ayuntamiento de dicha situación. «Nos han comunicado varios casos que se sitúan en el doble de lo permitido, e incluso hay alguno que puede llegar hasta los 500 metros cuadrados de ocupación», indicó Emilio Martín, quien añadió que el Consistorio en este asunto «solamente puede actuar como un intermediario ante la Junta y los dueños de los chiringuitos».

Desde el año 2011 el organismo autonómico es el encargado de asumir las competencias de ordenación y gestión del litoral, algo que anteriormente llevaba el Gobierno central. «Además, se da la circunstancia de que el próximo mes de julio se empiezan a renovar las concesiones administrativas para el próximo año, y aquellas que no estén regularizadas cuando se vuelvan a realizar estas mediciones no podrán ejercer su actividad a partir del próximo verano», explicó el concejal.

El concejal de Playas añadió que el Ayuntamiento veleño tiene previsto solicitar para la próxima temporada estival que se autorice una ampliación de la zona de uso en unos 100 metros cuadrados, con elementos desmontables, para que se puedan retirar una vez acabe la temporada turística. «Pero para que podamos acogernos a ello, es necesario que todos se encuentren dentro de lo que marca la ley», dijo el edil.

«Si no cumplimos estas exigencias que nos están marcando, esas concesiones que se están prorrogando ahora de año en año hasta que lleguemos a la concesión definitiva se podrían no autorizar».

Emilio Martín señaló que las sanciones económicas para los establecimientos que ocupen un espacio excesivo dependerá del número de metros cuadrados, y que en algunos casos podrían llegar a situarse en alrededor de 30.000 euros.