La empresa Chivo de Canillas que desde finales de 2012 está especializada en la elaboración y comercialización de cabrito lechal asado al horno inicia hoy en Dubai, en la feria de alimentación Gulfood que se erige en la más importante de Oriente Medio, un ciclo de presentaciones que mediante acuerdos ya cerrados en las primeras semanas de este año le permitirán multiplicar sus números hasta producir 2.000 chivos mensuales.

Si tenemos en cuenta que Canillas de Aceituno sacrificaba cada año unos 2.500 chivos hasta que nació esta empresa, el crecimiento exponencial de la misma ya ha marcado un antes y un después en el municipio axárquico. El éxito de la firma, calificada como una de las «estrellas» de la carta etiquetada con la marca Sabor a Málaga, está avalado entre otros aspectos por la facilidad que tiene el cliente particular o el propietario de un establecimiento de restauración para servir el producto.

«El chivo cocinado al horno va envasado al vacío y se puede preparar en unos minutos al microondas». Para el gerente de Chivo de Canillas, Carlos Aguilera, otros de los aspectos destacables es que él pertenece a una saga de restauradores locales que a través del Restaurante La Sociedad han acumulado 75 años de experiencia en el sector. «No tenemos que olvidar, además, que la provincia está a la cabeza de toda Europa en ganado caprino. Esta pasada semana, en la feria Madrid Fusión, muchos potenciales clientes se sorprendían al ofrecerles la carne de chivo, tan acostumbrados como están a que la gastronomía de Málaga se base en el pescaíto».

La empresa posee las certificaciones necesarias para que el producto pueda ser consumido por el cliente de religión musulmana al igual que el de tradición judía. Su portavoz agrega que estar desde la jornada de hoy en Dubai «tiene la importancia estratégica de asistir un encuentro que se celebra en la que sería la París europea. Todas las tendencias pasan por este enclave, donde ya hemos empezado a trabajar con un distribuidor y a partir de esta semana cerraremos el acuerdo con otro con una sede en Arabia Saudí», relata.

Aguilera argumenta que 2015 ya está grabado en la aún corta historia de Chivo de Canillas porque en enero se ha elaborado todo el etiquetaje en árabe y se ha cerrado toda la documentación requerida para que Gulfood marque el despegue internacional de la firma en Oriente Medio. «Han sido unas semanas importantes. Hace unos diez días ya estuvimos allí y no podíamos dejar ningún fleco al azar. Las grandes cadenas hoteleras que ya nos han elegido para sus cartas probaron el producto y el trabajo está hecho. Ahora nos toca recoger los frutos», finaliza.

Otro aspecto destacado del interés por la zona, además de que el consumo de carne de cerdo se encuentra limitado entre los musulmanes, es el poder adquisitivo de los potenciales consumidores. El precio medio en carta del cabrito asado será de 90 euros, que es prácticamente cuatro veces el del producto en la provincia malagueña. El próximo reto será consolidar la venta nacional fuera de Andalucía y la presencia en países como Alemania, donde también se localiza una amplia comunidad interesada. De hecho, acaban de remitir muestras a un total de 15 restauradores de aquel país.