El cuatripartito que gobierna en el Ayuntamiento de Rincón de la Victoria -PSOE, Ahora Rincón, IU y el PA- destinará 250.000 euros anuales al Plan de Rescate Social, dirigido a ayudar a las familias en situación más vulnerable del municipio, con la partida económica procedente de recortar un 30% el coste político municipal en relación al que tenía el anterior equipo de gobierno del PP.

Las medidas de este nuevo plan incluyen apoyo a las familias para que puedan afrontar gastos de servicios básicos, adquirir productos de primera necesidad, sufragar los gastos que conlleva la permanencia en el sistema educativo o mejorar la inclusión social de menores y adolescentes, «garantizando el éxito escolar» o la alimentación en época vacacional.

La alcaldesa, Encarnación Anaya (PSOE), apuntó que la iniciativa supone una inyección económica para cumplir los objetivos y lograr una óptima inserción social, laboral y educativa de las familias más vulnerables. Esta medida se pone en marcha esta misma semana, a través de los Servicios Sociales, tras la aprobación de la modificación del presupuesto durante el pleno celebrado el pasado miércoles.

La regidora destacó el cumplimiento de la propuesta que ya figuraba en el compromiso de gobierno de los 100 primeros días. Su compañera en el grupo socialista y edil de Políticas Sociales, Yolanda Florido, destacó la necesidad de implementar este nuevo plan, debido al incremento «tan significativo» que se ha registrado en el ámbito de la asistencia a las familias.

«Hemos duplicado las atenciones hasta la fecha respecto al año 2014», argumentó la responsable municipal durante la rueda de prensa. En el último trimestre de este año se van a destinar al nuevo plan 125.000 euros y un total de 250.000 euros anuales, el resto del presente mandato.

La elaboración del plan parte de un diagnóstico elaborado precisamente por las técnicas del Área de Políticas Sociales e Igualdad, que desde junio de 2014 a junio de 2015 ha destinado a ayudas económicas un total de 219.000 euros, lo que ha supuesto 745 ayudas a familias, «destinadas en un 65% a productos de primera necesidad».

Le siguen las subvenciones al alquiler de vivienda -20%-, el apoyo a la escolarización -7%-, y las ayudas para el pago del suministro de luz y el pago de las hipotecas, con un 6% y un 2%, respectivamente.