­El Ayuntamiento de Nerja reconoce que las obras de la depuradora que el Gobierno central ejecuta en el entorno de la urbanización San Juan de Capistrano y junto a la antigua travesía de la CN-340 se encuentran ya en su recta final. De hecho, todo apunta a que podría estar operativa a principios del próximo verano, según confirman a este periódico fuentes ministeriales.

Pero además, el Consistorio tiene previsto mantener en breve una reunión para conocer los plazos definitivos de tan ansiada actuación. De hecho, será el último municipio en culminar el saneamiento integral en el litoral malagueño. Esta infraestructura requerirá de una inversión de unos 23 millones de euros y está diseñada para poder depurar las aguas residuales que generen un máximo de 125.000 habitantes.

Hasta llegar a este momento histórico para un municipio turístico como Nerja, el camino ha sido bastante largo. Las obras llegaron a planificarse para su inicio hace más de una década. Sin embargo, antes tuvo la vecina localidad de Torrox una segunda estación en su término -para dar también respuesta a los residuos de la veleña Lagos y del litoral de Algarrobo-, que el término nerjeño su primera estación para evitar el vertido al mar de sus aguas sucias.

Los últimos obstáculos resueltos no están demasiado lejos. De hecho, el pleno del ayuntamiento nerjeño que cerraba el mes de octubre aprobaba de manera definitiva unos nuevos presupuestos municipales en los que casi destinaba la mayoría de sus 1,3 millones de euros para inversiones a saldar deudas vinculadas a la depuradora. El edil de Hacienda, Guillermo Landolfi (PSOE), denunció públicamente que el gobierno del PP le dejó en herencia el pago de algo más de un millón de euros como «indemnización por los terrenos de la nueva depuradora».

El Consistorio cedió en 2002 los terrenos para la futura EDAR al Gobierno central, pero hasta la actualidad sólo se habían pagado en compensación 176.000 euros a la Sociedad Azucarera Larios S. A. Las otras entidades a indemnizar, Maravillas del Sol S. A. y Maravillas del Mar S. A., recurrieron a los tribunales para fijar el justiprecio.

Década y media de espera para lograr el ansiado «vertido cero». El largo procedimiento para que la depuradora de Nerja pueda ser definitivamente una realidad daría para páginas y páginas. Cambios en el Gobierno central, demandas ante los tribunales para fijar el precio definitivo de los suelos cedidos por el Ayuntamiento tras su expropiación y otra serie de cuestiones burocráticas han llegado a desesperar a habitantes, turistas y empresarios del sector turístico -además de a representantes públicos que se marcharon sin ver hecho realidad este proyecto-.

El último paso administrativo ha sido el correspondiente a la urgente aprobación de un nuevo presupuesto municipal, por parte del gobierno en minoría integrado por PSOE e IU, que recoge una partida de 1.016.262,25 euros «para saldar una deuda por el suelo pendiente desde 2002».