Los mil dieciséis llega a Vélez-Málaga con la efeméride del fallecimiento de dos personajes capitales de la Literatura y Filosofía universal: Miguel de Cervantes Saavedra (1616 -2016)- del que se cumplen cuatro siglos- y el de la veleña María Zambrano (1991-2016) - que nos dejó hace veinticinco años- fechas especiales en ambos casos y que han de conmemorarse de manera particular.
La fuerte relación de ambos con esta tierra -de nacimiento en caso de Zambrano y profesional y literaria en caso de Cervantes- hacen de Vélez-Málaga un lugar de obligada visita para conocer, profundizar o entender desde una personal óptica la importancia de estos dos personajes - con las lógicas diferencias cronológicas- con un mismo espacio y entre sí.
Miguel de Cervantes estuvo en Vélez-Málaga (ciudad que nombrará en El Quijote al finalizar la Historia del Capitán cautivo, donde sus protagonistas alcanzan la libertad) como recaudador de impuestos durante varios días. Su estancia en este lugar, imaginamos, debió ser intensa hasta el punto de rescatar su nombre nuevamente dentro de la novela Los trabajos de Persiles y Sigismunda. Vélez-Málaga caló en el escritor alcalaíno hasta el punto de tenerla presente varias veces, como decimos en su obra escrita. Vélez-Málaga se erige, especialmente en este año, como Ciudad Cervantina por esta especial vinculación entre obra y autor, al cual se homenajea en la bella Sala Cervantes de la localidad.
María Zambrano, nacida en Vélez-Málaga en 1904, fue discípula aventajada de José Ortega y Gasset y una de las figuras capitales de la Filosofía y el Pensamiento del siglo XX. A pesar de marcharse de esta tierra a los pocos años de nacer, recordaba su infancia junto a su padre en este pueblo. Hoy aquí reposan sus restos y se custodia su legado - con importantes documentos, libros, manuscritos y obras de arte- que generosamente cedió a su ciudad natal. Una institución única para descubrir a la más universal veleña.
Zambrano sintió especial interés por la obra literaria y la personalidad de Cervantes, como quedó demostrado en el discurso que redactó la pensadora con motivo de la concesión del Premio Cervantes de Literatura. Esta cuestión no es baladí, ya que Quijote y Filosofía han tendido a ser comunes por la poca tradición filosófica española, de manera que los pensadores veían en esta obra cervantina valores filosóficos que paliaban la ausencia de sesudos ensayos. En el discurso reseñado, Zambrano se centra en los ideales de Libertad que contiene El Quijote.
Ante este acontecimiento mellizo, Vélez-Málaga desarrollará una variada programación de actos y diferentes actividades que para todos los públicos, se acogerán en las diferentes instalaciones que la ciudad posee. Un año para celebrar en Vélez-Málaga. Sólo les queda venir: les estamos esperando.
