El río Chillar, situado en la Axarquía, es un sitio de paso para miles de veraneantes cada año. La caminata de ocho kilómetros tiene tres puntos concretos en la que los visitantes suelen parar a contemplar los paisajes que se les presentan, así como para disfrutar de las pozas que cada ciertos tramos existen.
A partir de la segunda poza, el terreno se vuelve más salvaje y trabajoso. La visita masiva de turistas, que puede alcanzar los 3.000 visitantes, ha llevado al delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, y a la alcaldesa de Nerja, Rosa María Arrabal, a presentar un Plan de Autoprotección.
El objetivo es hacer frente a incendios forestales en la ruta del río Chillar. En palabras del propio Ruiz Espejo, el plan está «encaminado a la prevención, protección y seguridad en este entorno de gran valor ambiental y que registra una gran afluencia de visitantes, sobre todo en esta época estival, que en los fines de semana puede llegar a alcanzar los 3.000 visitantes».
Ruiz Espejo informó de que el Plan, que tiene que ser aprobado por el Ayuntamiento de Nerja en pleno, incorpora medidas en el cauce de río y aledaños, como el establecimiento de zonas de seguridad que estarán situadas en los cahorros de río, para que los senderistas se refugien en caso de incendio, aprovechando la protección de las paredes y la ausencia de vegetación.
No todo el plan se orienta al riesgo de incendios, aunque sea la máxima preocupación. En este sentido, las administraciones van a proceder a la limpieza de vegetación para que se pueda circular mejor, se van a incorporar sistemas de avisos y protocolos de seguridad así como aparcamientos controlados separados del río, al que se llegará a través de lanzaderas.
La Delegación Territorial de Medio Ambiente ha elaborado un folleto con recomendaciones de autoprotección a la población, como que se tenga siempre el teléfono cargado de batería, nunca huir por la ladera hacia arriba o salir por la única entrada y salida situada en el Sur, sin buscar senderos alternativos, siempre que no sea posible refugiarse en las zonas de seguridad.
La Junta de Andalucía ha colaborado con el Ayuntamiento de Nerja para estudiar, identificar y evaluar los riesgos que se derivan de la presencia masiva de personas, junto a la orografía del terreno en el que abunda la masa forestal y, por tanto el material combustible.
La alcaldesa de Nerja señaló la importancia de preservar el entorno y especialmente la calidad de las aguas. El objetivo de la elaboración de este Plan, según Ruiz Espejo, es coordinar una serie de medidas encaminadas a la prevención y amortiguación de los riesgos y efectos ocasionados en caso de que se produzca un incendio forestal.
«La finalidad ante todo es proteger a las personas, cuidando los valores de uno de los entornos ambientales más valiosos de la provincia, enmarcado en el Parque Natural de Sierras de Tejeda y Almijara».
Al acto de presentación asistieron también el presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Axarquía, Gregorio Campos, el director del COP, Miguel Ángel Catalina, y el jefe del Servicio de Protección Civil de la Delegación del Gobierno de la Junta, Rafael Gálvez, así como el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Nerja, Jorge Bravo Gallardo.
