Nieves estaba en casa arreglándose para salir a dar una vuelta con su marido cuando éste le dijo: "Pellízcame que nos ha tocado". Un décimo de última hora que compraron ayer y que hoy ha sido agraciado con 75.000 euros que invertirán para vivir algo más holgados y una pequeña vivienda si es posible. "No me va a quitar de trabajar pero al menos me ayudará", expone.

La historia de Nieves y su familia es de esas de las que uno se alegra al ver cómo ha sido de caprichosa la suerte. Con su marido Luis en paro y ella trabajadora de la limpieza la pareja invertirá el dinero en una vivienda ya que viven en el campo, en el Arroyo de Totalán, y asegura que su situación es algo incómoda. "Si no podemos comprar una casa al menos nos quitaremos algunas deudas", resalta aún emocionada.

El matrimonio tiene un hijo de 20 años con un empleo precario y este dinero supone una gran ayuda para la economía de la familia. No tienen pensado gastar en ningún capricho, la necesidad manda y sus prioridades están claras: comprar una vivienda y pagar deudas.

El número 95379 llegó por casualidad a ellos. No tenían ningún número, solo participaciones y ayer, tras un paseo por la cabalgata del Rincón de la Victoria se acercaron a la administración de la calle Córdoba y sacaron un número por máquina. Una decisión de última hora que les ha alegrado por completo esta entrada de año. "Lo hemos mirado y remirado. Cuando mi marido lo ha comprobado yo pensaba que le estaba dando un ataque al corazón o de asma. Me veía en el hospital Carlos Haya", narra Nieves que hoy se va junto a su familia a comer fuera para celebrarlo. "Hoy comemos fuera y el lunes ya veremos", dice ilusionada.