El exalcalde nerjeño y actual diputado provincial, José Alberto Armijo (PP), y media docena de técnicos han tomado ya la palabra en el seno de una comisión de investigación que, presidida por C´s, busca a los culpables del retraso en la obra de la depuradora de Nerja.
La edil Lola Sánchez, como presidenta de la comisión que fue inaugurada el pasado jueves con la comparecencia de Armijo, ha adelantado que hasta ahora se ha podido cumplir el calendario establecido, por lo que confía en que en «el plazo máximo de seis meses», acordado por sus integrantes, puedan depurarse responsabilidades.
«Podemos decir que de momento marcha muy bien. Se han mantenido dos primeras reuniones, después de que hayamos dividido el trabajo que tenemos por delante en dos subcomisiones. Estamos ante una primera toma de contacto. Armijo, por ejemplo, no ha tenido ningún problema en contestar a todo lo que se le preguntó», agregó Sánchez.
Técnicos de distintas áreas han tenido también la oportunidad de «mostrar su particular visión de unos trabajos que se han dilatado en el tiempo y que llevan meses paralizados» como insiste la alcaldesa, la socialista Rosa Arrabal. La comisión no sólo analizará el desarrollo y ejecución del proyecto durante los últimos año, sino que incluso supervisará la expropiación de los terrenos, según matizó la portavoz de C´s.
«Queremos conocer por qué se llevó la estación depuradora a un emplazamiento como el elegido, qué criterios se tomaron», añade la propia Sánchez. Todo apunta a que el debate más intenso se centrará en las acusaciones cruzadas entre el PP y el PSOE. Armijo y el resto de su grupo municipal señalan que el actual tripartito lleva desde hace meses sin permitir el avance de las obras, como consecuencia de mantener bloqueados los permisos municipales necesarios. Pero Arrabal se defiende, al remarcar que es el Gobierno central el único responsable de los retrasos acumulados.
Ni siquiera hay un acuerdo sobre el porcentaje de obra ejecutada. Para el Consistorio las obras se hallan a algo más del 75% de ejecución, mientras que el Gobierno central ya elevó hace pocos meses dicho listón, hasta situarlo en casi el 90%. De lo que nadie duda es de que Nerja, como enclave emblemático del turismo en la Costa del Sol, no merece estar en la lista de puntos negros que a España le ha acarreado una sanción millonaria de la Unión Europea.
En la agenda de obras por ejecutar incluso restan los trabajos en el entorno de Burriana, una estación de bombeo y colectores. Así lo pueden constatar los asistentes a las primeras sesiones de la comisión de investigación que integran dos ediles por grupo (PP, PSOE, IU-CA, C´s y EVA-Podemos) y un funcionario en labores de secretario.
