­Una joven empresa con sede en el camino de Algarrobo de Vélez Málaga, Excel Trop, ha conseguido multiplicar por siete su facturación en apenas cuatro años. Dedicada a la comercialización de las frutas subtropicales más exportadas de la provincia, el aguacate y el mango, en menos de un lustro han pasado de 15 a 70 puestos de trabajo como media y rozan en la actualidad una facturación anual de 30 millones de euros.

Óscar Ramírez expresa que este proyecto emprendedor nade en el ámbito familiar: «Somos dos hermanos y otros dos hermanos más, que son primos nuestros. Pertenecemos a una cuarta generación dedicada a la venta de fruta. Aunque nuestro abuelo se dedicaba a la pasa moscatel, nuestro padre siguió ya con el aguacate. En casi década y media hemos vivido la revolución de esta fruta subtropical y luego la del mango», argumenta.

Excel Trop ya abastece de mango a cadenas de alimentación de la talla de Mercadona, gracias a una firme apuesta por la innovación en un mercado totalmente globalizado. De hecho, sus productores están en países como Perú. «España aún no tiene un peso internacional tan importante como para fijar los precios. Estamos constantemente pendientes de lo que dictan mercados productores como México, Israel, Chile, Colombia o Perú».

Ramírez recuerda que en el primer año completo de existencia de Excel Trop facturaron unos 4 millones de euros. Al año siguiente se situaron en 7; en 2014, 14; un año después, 17; y el pasado ejercicio se cerraba con 28,7 millones facturados. Ese crecimiento exponencial, como agrega, tuvo un punto de inflexión hace ahora dos años: a raíz de los acuerdos de comercialización que la familia cerró con Mercadona. De los 4,7 millones de kilos de mangos que venden anualmente, el 30% va con destino a esa cadena de supermercados.

Experiencia de sus antepasados

Paradójicamente, pese a que se establecieron frente al parque de bomberos de Vélez Málaga, con la idea de crecer, cada año han tenido que imponer nuevas ampliaciones en sus instalaciones. «Es lo ideal, es para estar contentos. Pero lo cierto es que vamos a tener que mudarnos muy pronto, al Parque Tecnoalimentario o a otro emplazamiento», relata Ramírez.

A sus 40 años de edad, no oculta que toda la experiencia de sus ancestros ha sido fundamental a la hora de encontrar agricultores de confianza con los que ofrecer un subtropical en un óptimo punto de maduración y con una suficiente seguridad alimentaria.

En este sentido, las instalaciones del puerto de Algeciras le sirven a esta empresa de entrada directa a los subtropicales que proceden, en determinadas épocas del año, de Perú. «Con los productores de allí vamos mejorando aspectos como el color y el sabor. Se va trabajando bastante en este sentido. Justo vamos a hacer una prueba dentro de poco y esperemos que sea fructífera», indica Ramírez.

Pero no sólo introducen la fruta que se produce a unos 10.000 kilómetros de distancia. Se encargan de generar empleos indirectos en la Axarquía, mediante productores locales de aguacate y mango, asimismo han empezado a producir de manera directa. «Nosotros empezamos sin producción propia, ya tenemos 25 hectáreas de cultivos y los planes son los de seguir creciendo, hasta alcanzar el centenar de hectáreas», concluye este emprendedor axárquico.