El joven de 25 años que recibió un hachazo en al cabeza el pasado martes en Periana fue atacado por la espalda y sin que se produjera discusión previa con su vecino. Pese a que la relación entre ambos estaba muy deteriorada por las rencillas existentes entre sus respectivas madres desde hace muchos años, fuentes cercanas al caso aseguran que el presunto agresor, que ingresó este miércoles en prisión, atacó sin mediar palabra. Esta versión añade que los hechos se produjeron sobre las 17.00 horas en la calle Las Monjas cuando la víctima se encontraba colocando una escalera en la baca de su vehículo, ya que tenía previsto trasladarse a Málaga capital para hablar con su jefe.
El joven, que tenía previsto reincorporarse al trabajo después de superar una lesión en un brazo, declaró tras los hechos a los investigadores que en esa ocasión no habían discutido y que se vio sorprendido por la espalda, por lo que en el primer golpe no tuvo opción de defenderse. Las fuentes indican que fue al darse la vuelta cuando comprobó que le había golpeado con un hacha y que el ataque continuaba. Aquí es cuando se protege con los brazos y el segundo golpe le fractura la muñeca derecha.
Acto seguido, con la ayuda de su madre que se había percatado de la agresión, se introdujeron en su casa y llamaron al servicio de emergencias 112, que movilizó a una ambulancia y a la Guardia Civil, cuyos efectivos detuvieron al presunto agresor mientras los sanitarios trasladaban a la víctima al Hospital de la Axarquía. Allí recibió cinco puntos de sutura en la cabeza y fue tratado por la lesión de su muñeca. Durante la jornada de ayer, el juez que tomó declaración a las partes ordenó el ingreso en prisión del presunto agresor, según fuentes jurídicas.
