El Museo de Nerja, situado en el corazón del casco urbano de la localidad y dependiente de la fundación que gestiona la cavidad nerjeña, alcanzó el pasado año la barrera de los 60.000 usuarios registrados, más de un 16% más de los visitantes del ejercicio anterior. El espacio cultural se fija ahora como meta superar la barrera de 65.000 visitas.

Los responsables del recinto indican que, en pleno proceso de expansión, la reciente reforma museística ha contribuido a mejorar las cifras de anteriores años. En esa primera fase, inaugurada el pasado mes de marzo, se han mejorado numerosos aspectos. «Pero al mismo tiempo estos números reflejan el buen funcionamiento del tren turístico que conecta la Cueva y el Museo nerjeño, con el fin de mejorar el tránsito entre ambos puntos», agregan estas fuentes.

La Fundación Cueva de Nerja remarca que las mejoras realizadas y proyectadas en el marco de la reforma de contenido incluyen una segunda fase que verá la luz a lo lago del presente 2018. «El incremento de visitantes se traduce también en una ampliación del perfil de nuestro usuario, gracias a la incorporación de objetos cotidianos que reflejan la historia reciente de la localidad y de la comarca. De esta manera, cada vez llama más la atención no sólo de turistas, sino de vecinos y residentes», insiste la propia Fundación.

Agrega que las cifras turísticas de récord alcanzadas por la Costa del Sol durante el último año también repercuten positivamente en el flujo de visitantes que ha registrado Nerja en su conjunto y especialmente el recinto museístico. Y se remarca que la ampliación de la oferta y de la programación de actividades juegan un papel primordial para su proyección como espacio de referencia en el municipio axárquico.

Al respecto se avanza que en los próximos meses se van a desarrollar «talleres, conciertos, conferencias, representaciones teatrales, presentaciones de libros, concursos y hasta un total de seis muestras temporales, cuya naturaleza aborda desde la fotografía y la pintura, hasta la escultura y la performance, además de incluir una exhibición sobre oficios perdidos».