Sólo por unas horas se retomaron ayer los trabajos para localizar al joven buceador veleño Fidel Jiménez. Un temporal obligó a suspenderlos a las dos de la tarde, después de que el lunes la familia hiciese un llamamiento para que la Guardia Civil volviese al lugar donde hace dos domingos desapareció. Los agentes rastrearon por mar y aire el enclave situado frente a las costas de la localidad gaditana de Barbate, donde hace unos días los propios amigos del desaparecido encontraron una de sus aletas.

Dicho hallazgo fue el detonante para que las autoridades volviesen a activar el plan de búsqueda, suspendido este pasado fin de semana después de seis jornadas sin resultado alguno. Los padres de Fidel se personaron ayer, de nuevo, en tierras gaditanas. Allí volvió a desarrollar su labor, desde primera hora de la mañana, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil.

Pero a las dos de la tarde se comunicó oficialmente la suspensión de dicho dispositivo. La madre de Fidel, Montserrat Marín, confirmaba tal extremo a este periódico y comunicaba que junto a su marido se disponían a regresar al mediodía a su domicilio en Vélez Málaga. Agregaba que ahora todo depende de la evolución del temporal, de manera que los familiares confían en que no se prolongue durante demasiados días y muy pronto puedan retomarse los trabajos.

Fidel practicaba pesca submarina a pulmón el pasado 22 de julio cuando por razones que se desconocen no consiguió volver a la superficie tras una de sus inmersiones. Sus acompañantes, un amigo también amante de la pesca a pulmón y un barquero, apenas pudieron ver su coronilla instantes antes de que se sumergiese definitivamente y no volvieran a hallar rastro alguno de él.

Según varios submarinistas, el lugar de la desaparición, el banco de Trafalgar, es un enclave situado a unas cinco millas náuticas del litoral, «con una riqueza pesquera extraordinaria, pero muy peligroso para pescadores inexpertos». A sus 23 años, Fidel apenas vivía desde hacía un mes en Barbate, donde había encontrado trabajo en una pizzería y había empezado a compaginar su pasión por la pesca con dicha ocupación.

Ante la desactivación hace unos días del plan de búsqueda, el pleno del Ayuntamiento de Vélez Málaga aprobaba, precisamente ayer, una moción institucional donde se expresa el apoyo de todos los grupos políticos a la familia y amigos y, al mismo tiempo, se insta «a las administraciones competentes a continuar con las labores de rastreo, con todos los recursos humanos y materiales necesarios, hasta la localización del joven».

Por ahora la búsqueda está interrumpida. Pero existe un compromiso para reanudarla en cuanto la meteorología lo permita.