Ni los bajos precios de la uva ni las altas temperaturas de estas fechas arrugan a los vendimiadores en las empinadas lomas de la comarca de la Axarquía. Ayer, la Denominación de Origen Málaga y Sierras de Málaga, a modo de homenaje, incidió con motivo de los primeros días de vendimia en ese carácter heroico que posee el agricultor en esta parte de la provincia, puesto que en ningún otro lugar de Europa se mantiene el uso de mulas para el traslado de las uvas.

Las previsiones de la cosecha recién iniciada son excelentes, si bien es cierto que los portavoces sindicales insisten en que deben articularse nuevas líneas de ayudas para sustituir las cepas más viejas, que a la vez son las que tienen un menor rendimiento. Las condiciones meteorológicas, sin embargo, auguran a que las toneladas de uvas se mantengan o incluso sean superiores a las de estos últimos años.

«Estos viñedos son los que se encuentran más al sur del continente europeo, en plena zona de la Denominación de Origen Málaga y Sierras de Málaga, famosa internacionalmente por sus moscateles dulces, y la vendimia en la Axarquía es enormemente singular y ha sido definida por los críticos como extrema y heroica», remarcó el Consejo Regulador malagueño en su comunicado.

En municipios como Almáchar, Moclinejo o El Borge alrededor de 2.000 familias tienen uno de sus pilares económicos en la uva, aunque cada vez es más difícil encontrar a vecinos de estas localidades que no tengan otras alternativas como ingresos familiares. De hecho, en el conjunto de la provincia cada vez tiene un menor peso económico este cultivo.

En la Axarquía, por ejemplo, el sector de los árboles subtropicales ha avanzado en detrimento de la vid en muchas localidades del interior. La recolección manual de la uva en pendientes de hasta un 70% de desnivel complican sobremanera la supervivencia de las explotaciones. Ni siquiera la construcción de terrazas, que favorecen la recolección, alivian el esfuerzo de personas y de animales de tiro.

Según el Consejo, el estado sanitario de las cepas y los racimos es «muy bueno», por lo que se prevé que la calidad de la uva vendimiada sea excelente, con una maduración alcohólica y fenólica óptimas. Asimismo se ha referido a las abundantes lluvias y las suaves temperaturas «que han propiciado una buena evolución del proceso vegetativo de la planta».

Días atrás sí que manifestaban los propios productores que esas condiciones han retrasado en dos semanas «el inicio de la vendimia para vinos espumosos».