La experiencia es un grado, pero también todas las precauciones ya dictadas en cada uno de los cursos de buceo que se imparten. El responsable del club Apañao Sub, José Luis Padilla, que ejerce como instructor titulado desde hace más de una década en Torre del Mar, indica que a veces los accidentes son inevitables. Hasta en el ámbito doméstico se producen, de la manera más ridícula. «Pero en el mar determinados riesgos son innecesarios», relata. Así recomienda el buceo «siempre en pareja». Aunque no es habitual en la pesca sumarina, sí que la estrategia «salvaría vidas».

La muerte del joven veleño Fidel Jiménez frente a las costas gaditanas de Barbate, mientras practicaba la pesca a pulmón, ha generado no pocos debates en el sector. Para otros buceadores consultados en la zona de Nerja y La Herradura, «sumergirse sin bombona a más de 20 metros de profundidad entraña un riesgo muy significativo». Para estos expertos, es difícil analizar desde la distancia las condiciones en las que el buceador fallecido pudo ahogarse. «Sólo las autoridades sabrán, por la autopsia, qué pudo sucederle. No nos corresponde más que pedir precaución a los amantes del buceo y a que sigan los consejos de los monitores», agregan.

«Ir en compañía es lo mejor. En los cursos e inmersiones turísticas siempre lo hacemos. Dos personas que se estén viendo la una a la otra, que tu compañero pueda darte aire si se rompe un regulador. Que por eso siempre llevamos dos, por si se le tiene que dar uno a quien está acompañándote», agrega Padilla, que a sus 63 años presume de que su hija Celia, de 22, no sólo ha seguido sus pasos. «Ella es campeona de España de fotografía submarina y al mismo tiempo modelo. Conocemos muy bien el mundo del submarinismo, porque obtuve mi primera titulación en los setenta, estando en el Ejército», añade.

Expresa este veterano instructor que cada vez hay más turistas que se acercan a la comarca de la Axarquía por el buceo, para disfrutar de los fondos marinos. «Pero en diez años se han deteriorado mucho. Lo digo con conocimiento de causa porque nos sumergimos a diario. En una década, por ejemplo, casi ha desaparecido toda la pradera marina que había frente al club náutico de Torre del Mar. Era única en Europa y venían expertos de muchos países a estudiarla y a admirarla. Pero lamentablemente el daño que se ha hecho, sobre todo por la contaminación, es irreparable», indica.

Entre quienes se inician en el buceo con Apañao Sub son ahora más los españoles que los extranjeros. «Lo primero es indicar cómo ir respirando o que nunca debe aguantarse la respiración bajo el mar», relata José Luis. Consejos que se suceden, curso tras curso, hasta poder conseguir «las tres estrellas» y alcanzar el grado de maestro o instructor para nuevos submarinistas.