Juan José Cortés, padre de Mari Luz, la niña onubense de 5 años asesinada en 2008, ha pedido hoy a los padres de Julen, el niño que cayó a un pozo en Totalán (Málaga), que "no pierdan la esperanza" porque "son jóvenes y tienen fortaleza para soportar algo así".

Cortés, que acompaña a los padres de Julen desde ayer, ha asegurado a los periodistas que va a continuar con ellos y que "hasta que no se resuelva" no va a dejar a esta familia.

Como impulsor de la Plataforma 18M, que suele acudir cuando hay una búsqueda de un menor, ha asegurado que conoce "el trauma que supone que tengas a tu hijo ahí y no sepas como está".

Cortés, que acompañaba al padre de Julen, José Rosello, en su comparecencia ante la prensa, ha añadido que ayer consiguieron que los padres del niño malagueño salieran del lugar de la desaparición y acudieran a su casa a asearse un poco, tras lo que "volvieron inmediatamente, porque no quieren moverse del lugar", ya que no se sabe en qué momento se puede encontrar "una buena noticia".

"Dentro de la gravedad y lo peculiar que es el caso, hay muchas posibilidades y tenemos toda la esperanza de que a Julen se le pueda rescatar con vida", ha asegurado Cortés.

De padre a padre, ha pedido a José "que tenga paciencia, que la esperanza es lo último que se pierde", y le ha asegurado que está "toda España para ayudarle".