La falta de verticalidad del pozo paralelo construido entre el pasado sábado y este lunes para agilizar las tareas de rescate de Julen obligó ayer a perforarlo otra vez, con un ancho mayor a lo largo de los últimos 20 metros (de un total de 60 de profundidad). Esta circunstancia impidió que los ocho integrantes de la Brigada Central de Salvamento Minero de Asturias entraran ayer en acción, tal y como oficialmente se había anunciado. Este trabajo de perforación se dio por terminado la pasada noche y comenzaron los trabajos de encamisado, consistentes en meter un tubo en el túnel de 60 metros para evitar derrumbes y facilitar el trabajo de rescate.

La comisión técnica encargada de completar la obra civil que permita acceder al pequeño encontraba así «dificultades en el único tramo» donde no se esperaba tenerlas. El origen era un saliente en el túnel situado en la cota -42 metros, que desviaba la trayectoria de la galería vertical que impedía el encamisado. La repetición de la perforación, aunque más sencilla, suponía un mazazo para los operarios, después de que la primera perforación concluyera a última hora del lunes después de 55 horas de «incertidumbre por la extrema dureza de diferentes estratos de pizarra y cuarcita que se localizaban al paso de la perforadora».

Si los ingenieros confiaban en tener lista la colocación de los tubos para que los mineros iniciaran al mediodía de este martes la excavación manual de la galería horizontal, de unos cuatro metros, el nuevo imprevisto volvió a generar una demora de al menos otras 24 horas sobre lo planeado el pasado fin de semana. El motivo no era otro que la necesidad ya reseñada de tener que volver a perforar los 20 metros finales del túnel vertical para ensanchar la cavidad, justo donde las labores de encamisado se habían encontrado con que los tubos no se ajustaban al hueco abierto.

El encamisado se pudo retomar a lo largo de esta noche, con idea de que en unas siete horas pudiera estar terminado y dar paso a los mineros de la Brigada de Salvamento, que tendrían que descender al fondo de la galería vertical e iniciar, a mano, el túnel que conecte éste con el que se encuentra Julen. Este trabajo, muy complicado y que requiere ir asegurando el túnel constantemente, ocuparía unas 12 horas de trabajo.Incertidumbre

De esta forma lo expresaban los portavoces de la comisión: «Han aparecido dificultades técnicas en el entubado del pozo tras superar los 40 metros de profundidad. Los tubos no sobrepasan esa cota y, ante el riesgo de que puedan quedar atascados, se ha decidido sacarlos para preservarlos en perfecto estado», relataban dichas fuentes. Por este motivo, se barajaron de inmediato diversas opciones, al objeto de «reconducir la situación» y se optó «por la más segura, el rellenado del nuevo pozo con tierra fina y una vez completada dicha operación, proceder a una nueva perforación con un engrosamiento un poco mayor».

Era un nuevo contratiempo que se sumaba a los numerosos que se han producido desde que comenzó la obra civil hace ya más de una semana. «No es posible dar una estimación de tiempo. La maniobra ya ha comenzado», indicaban los portavoces de la comisión técnica.

Con esta situación, al cierre de esta edición se desconocía en qué momento van a poder comenzar las obras de la galería horizontal, ya que es de sobra conocida la dificultad del terreno en esta parte del Cerro de la Corona de Totalán.

Este nuevo obstáculo, como señalaron fuentes del entorno de la familia, también aumentó la desesperación de los padres del pequeño de dos años. «Hemos conocido la noticia justo antes de que se hiciera pública a los medios de comunicación y como cualquiera puede imaginar esto es un nuevo mazazo», relataban.

El Gobierno central previamente destacó la solidaridad que este caso ha generado en todo el país. Se remarcó que se han movilizado en muy pocas horas decenas de empresas privadas, que desde un primer momento se han añadido al dispositivo establecido con la coordinación de «los cuerpos de seguridad del Estado, emergencias y bomberos». Así se subrayó que hasta el pasado fin de semana se consiguieron remover 35.000 metros cúbicos de tierra mediante excavaciones paralelas al pozo.

Visita del delegado en Andalucía

Pasadas las cinco de la tarde, y ya conocidas las circunstancias del nuevo retraso generado por la falta de verticalidad del pozo paralelo ejecutado, el delegado de Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, visitó tanto el puesto de mando como a otras agrupaciones destacadas en Totalán para continuar con las tareas de rescate.

Posteriormente, durante una comparecencia en la que estuvo acompañado por la subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez, y por integrantes de la comisión técnica, calificó la situación de «extrema e inédita», al referirse a la obra civil que se ejecuta en estos días. «Nos encontramos además con unos trabajos de una magnitud extraordinaria, al moverse más de 40.000 toneladas que en cualquier circunstancia normal se tardarían meses en trasladar».

«Hablamos de una labor extrema por las circunstancias del lugar al que por accidente cayó Julen y también por la urgencia para llegar de la manera más delicada posible, sin generarle ningún daño añadido a esa caída a un pozo que tiene una altura comparable a la Giralda de Sevilla», agregó antes de agradecer su labor a todo el dispositivo técnico, voluntarios, especialistas o bomberos trasladados desde tierras asturianas.

Por su parte, el delegado en Málaga del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, Ángel García Vidal, enumeró como portavoz del equipo técnico algunos de los aspectos que han complicado la ejecución del encamisado de la galería vertical culminada a última hora de este lunes. Asimismo abundó en que todos los integrantes del dispositivo de trabajo para localizar al pequeño mantienen el mismo ánimo: «Cada vez sentimos que estamos más cerca de Julen y que no duden de que apostamos por la solución» planteada desde un primer momento.

Tras terminar la nueva perforación que se retomó ayer, el escenario volvería al punto de partida del lunes pasadas las ocho de la tarde, por lo que se requerirían al menos otras 12 horas para que el equipo de ocho mineros pueda empezar a bajar de dos en dos y pueda iniciar las labores de construcción de la galería horizontal que conduzca hasta el tapón que impide desde la pasada semana determinar la localización de Julen. Los mineros bajarán en la cápsula que ha diseñado el director técnico del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga, Julián Moreno, y que fabricaron la pasada semana dos hermanos con taller de herrería en Alhaurín el Grande.