Otro nuevo jarro de agua fría para un sector pesquero en la provincia cada vez más amenazado de muerte. Los recortes aprobados esta semana por el Parlamento Europeo sentencian, a juicio de los armadores, el futuro de casi 40 embarcaciones de arrastre en la provincia que suponen más de un tercio del total de barcos dedicados al marisqueo.

La Eurocámara establece una reducción progresiva de la actividad de este sector en el Mediterráneo andaluz, con recortes del 10% para 2020 y del 30% en los cuatro años siguientes, e incluso se prohibirá durante tres meses la pesca de arrastre en fondos de más de 100 metros de profundidad y a menos de seis millas del litoral en tramos que no lleguen a esos 100 metros. Además, la actividad quedará limitada a 15 horas diarias durante cinco días a la semana.

Para el presidente de la Federación Andaluza de Asociaciones Pesqueras, Pedro Maza, ni siquiera el apoyo de la Junta de Andalucía a los 90 barcos de arrastre de esta comunidad autónoma ha servido para impedir esta medida. Enfrente figura la presión de los colectivos ecologistas, que consideran que más del 80% de las especies están sobreexplotadas en las aguas mediterráneas.

La decisión de Bruselas, que entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2020, salió adelante con 461 votos a favor, 62 en contra y 101 abstenciones. Afectará sobre todo a especies como distintas variedades de gamba, merluza, salmonete o la cigala. Para los pescadores con base en el puerto axárquico de Caleta de Vélez, «el Parlamento europeo ha puesto fecha al sector pesquero malagueño tal y como lo conocemos hasta ahora», según manifiesta uno de los armadores consultados en unas instalaciones que presumen de ser las más productivas de todo el Mediterráneo andaluz.

No obstante, fuentes del Gobierno central señalan que España ha luchado para hacer un marco normativo justo y acorde a la situación de agotamiento que presentan muchos caladeros mediterráneos. Además, se especifica que Bruselas por primera vez permite a los distintos países afectados por la Política Pesquera Común establecer sistemas de gestión participativo, de manera que se podrán tomar medidas técnicas locales dentro del marco recién aprobado y que no tiene aplicación inmediata, como también se temía.

Los pescadores muestran muchas dudas respecto a esos sistemas de gestión en los que cada gobierno central tendrá participación. Y apuntan que en medio de este debate también figuran distintos acuerdos con Marruecos en el marco de su acuerdo pesquero.