Almáchar celebrará el próximo 7 de septiembre la quincuagésimo primera edición de su Fiesta del Ajoblanco, un homenaje a este típico producto gastronómico que posibilitó la construcción de una carretera con la que la localidad dejó atrás su aislamiento.

El ajoblanco, un plato humilde que tomaban los campesinos, fue en 1968 el reclamo que emplearon los vecinos de Almáchar para organizar una fiesta a la que invitaron a los políticos de la época. Éste sirvió de excusa para que las autoridades tomaran conciencia de la necesidad de mejorar las comunicaciones entre la localidad y la capital malagueña. Los políticos fueron agasajados con este plato y tan solo tres años después, se construyó una nueva carretera.

La celebración se convirtió de esta manera en la pionera de las fiestas gastronómicas de la provincia de Málaga y propició la construcción de un vial de ocho kilómetros entre Almáchar y Moclinejo, lo que redujo la distancia con Málaga de 60 a 30 kilómetros.

La jornada festiva se iniciará en torno a las 11.00 horas y se prolongará hasta la madrugada. Los visitantes podrán degustar gratuitamente el clásico ajoblanco y otros productos como pasas o vino moscatel.

Además de las degustaciones, con 3.000 litros de ajoblanco, habrá actuaciones de pandas de verdiales y grupos de baile.

El pregón de esta fiesta declarada de Singularidad Turística Provincial y de Interés Turístico Nacional de Andalucía correrá a cargo del periodista Juan Carlos Jiménez.

Durante el evento, la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (Agapa) recibirá el premio Ajoblanco Andalucía, por su implicación en la elaboración del proyecto para la distinción de la uva pasa de la Axarquía como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM).

También serán galardonados el Museo de Vélez-Málaga, por ser un transmisor de la historia de la

comarca; el Colegio de Corredores de Seguros, por su labor en la provincia en la mediación de conflictos, y el Hospital Comarcal de la Axarquía.