La Ermita de Nuestra Señora de las Angustias de Nerja ha cumplido años. Nada más y nada menos que 300. Tres siglos de historia viva de uno de los municipios más turísticos de Andalucía y que ha sabido respetar sus tradiciones por encima de ese carácter cosmopolita que lo ha convertido en destino de primer orden.

Autoridades civiles y eclesiásticas se han dado cita para la conmemoración del aniversario de la construcción del edificio, en 1720, por parte de un emprendedor matrimonio granadino, integrado por Luis López Enríquez y Bernarda Alférez, que se trajo de su tierra una imagen de la patrona de la capital de La Alhambra.

No se trata en absoluto de un monumento más. El inmueble fue diseñado con una cúpula que alberga unos frescos originarios de la escuela granadina, restaurados a lo largo de la década pasada, y que para el Ayuntamiento de Nerja son uno de los avales para solicitar durante años a la Junta que declare la protección de este monumento como Bien de Interés Cultural (BIC).

Hasta el propio Consistorio ha impulsado hace menos de dos años, con la ayuda de la Consejería de Turismo, una restauración que ha permitido rehabilitar su fachada y reparar «las patologías del templo, en el sentido de eliminar humedades que afectaban a su patrimonio».

El hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de las Angustias, Francisco Martín, fue uno de los encargados de descubrir con el alcalde nerjeño, José Alberto Armijo (PP), el cartel conmemorativo de la efeméride, donde se muestra un montaje fotográfico elaborado por el artista Jorge Urbano y un logotipo que se utilizará durante todo este año, en cada uno de los actos previstos con motivo de estos 300 años de recinto monumental.

Después tomó la palabra el sacerdote de la localidad, José Miguel Antequera, presentado por una de las integrantes de la Hermandad, Montserrat Platero. En su alocución realizó «una emotiva exaltación de la Virgen de las Angustias», patrona nerjeña desde 1720. La velada concluyó con la interpretación del himno de la Hermandad de las Angustias, a cargo de todos los asistentes, entrequienes se encontraban autoridades locales, como la edil de Cultura, Gema Laguna (PP); el Juez de Paz de Nerja, Antonio Jaime; y otros representantes públicos municipales y provinciales, además de portavoces de la sociedad civil nerjeña.

Próximas fechas conmemorativas

Quienes deseen profundizar en ese ciclo de 300 años contemplado por la Ermita nerjeña, que llegó a utilizarse incluso como sede de la CNT durante la Guerra Civil, tienen una cita el próximo 15 de febrero dentro del propio monumento. A partir de las siete de la tarde, el historiador Francisco Capilla, autor del libro que resume la historia de este templo, impartirá una conferencia magistral por su condición de doctor y experto en lo que ha dado de sí la localidad nerjeña durante estos últimos siglos.

Otro punto de encuentro en estos próximos meses lo representará, el 18 de marzo, la inauguración en el interior del Centro Cultural Villa de Nerja de una exposición fotográfica de la historia del edificio.

La culminación de este ciclo de actividades sería que la Junta atendiera una reivindicación que se remonta a enero de 2010. Justo en esas fechas se elevó, mediante su aprobación plenaria, una iniciativa que solicitaba la declaración de BIC.

En el texto se recordaba el estilo barroco de un monumento que se construyó en el siglo XVIII y en cuyas pechinas están representados los cuatro evangelistas, «mientras que en las pilastras y el arco triunfal» se encuentran las virtudes teologales. Además se recordaba que en «esta iglesia, además, se da culto a la patrona de Nerja, la Virgen de las Angustias, que tiene una gran devoción para los vecinos».