Tres mineros reclaman en la Audiencia Nacional una mayor distinción por el rescate de Julen

La Guardia Civil les concedió la medalla con distintivo blanco por cavar la galería horizontal que llevó hasta el niño, pero entienden que merecen el distintivo rojo, la condecoración pensionada que sí obtuvieron los cinco agentes del instituto armado con los que trabajaron bajo tierra - Una sentencia reciente les favorece

Dos mineros inician el descenso para cavar la galería horizontal. | L.O.

Dos mineros inician el descenso para cavar la galería horizontal. | L.O. / jose torres. málaga

Las condecoraciones que la Guardia Civil tenía previsto conceder a 38 personas por su participación en el rescate del cuerpo de Julen del pozo de Totalán se encuentran en los tribunales. Un año y tres meses después de que el ministro del Interior firmara la resolución para otorgar la Cruz de la Orden del Mérito del instituto armado en tres categorías diferentes, el recurso de tres de los galardonados ha impedido que las medallas hayan sido concedidas a los elegidos por su aportación en el trágico suceso que puso en vilo a todo el planeta.

Los demandantes son tres de los componentes de la Brigada Central de Salvamento Minero Hunosa, el equipo de élite desplazado desde Asturias para cavar manualmente los cuatro metros del túnel que unió la galería vertical con el punto del pozo en el que quedó sepultado el pequeño. Pese a que el resto del equipo dio por buena la cruz con distintivo blanco que les asignó la Guardia Civil (el jefe de Brigada fue reconocido con la Cruz de Plata), estos consideran injusto que no se les haya otorgado el distintivo rojo que sí obtuvieron cinco guardias civiles con los que trabajaron bajo tierra: tres miembros del Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (Ereim) de Málaga y otros dos agentes de Madrid y Granada de la misma especialidad. Los primeros acompañaron a los mineros durante los trabajos en el túnel y fueron los que sacaron con sus manos al niño del pozo, mientras que los dos últimos fueron los encargados de colocar las microvoladuras con las que puntualmente se allanaba el camino.

La diferencia entre ambas medallas va más allá del color. El detalle rojo va asociado a una pensión vitalicia del 15% del sueldo de los guardias civiles u otros funcionarios que la reciban, mientras que a las personas cuyo salario no dependa del Estado se les podría conceder una pensión «con arreglo a los porcentajes citados para las diferentes categorías, aplicados al sueldo regulador de sargento primero de la Guardia Civil», según detalla la propia Orden del Mérito del cuerpo.

El caso lo lleva la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, cuyas fuentes han indicado esta semana que, tras una resolución del 23 de marzo, la causa se encuentra en plazo de contestación de los codemandados, en este caso la Guardia Civil y el Ministerio del Interior. Otras fuentes, por su parte, explican que esta es la segunda demanda de los reclamantes, quienes inicialmente solicitaron impugnar el proceso completo por el que se concedieron las 38 medallas. Según esta versión, esa opción fue descartada por el juez y ahora sólo exigirían que le otorgaran la roja, por lo que el resto de condecoraciones se mantienen tal y como refleja la orden que el ministro Fernando Grande-Marlaska firmó el 4 de diciembre de 2020.

Orden del Mérito

  • Artículo 8. Requisitos Cruz con distintivo rojo. En el transcurso de un servicio de manifiesta importancia que comprenda un ineludible riesgo de perder la vida, ejecutar para su cumplimiento acciones claramente demostrativas de extraordinario valor personal, iniciativa y serenidad ante el peligro. En acto de servicio o con ocasión de él, resultar muerto o con lesiones que provoquen la inutilidad permanente para el servicio sin menoscabo del honor, al afrontar un peligro manifiesto contra la propia vida.
  • Artículo 9. Requisitos Cruz con distintivo blanco. Ejecutar, dirigir o colaborar directamente en el éxito de un servicio en el que por su extraordinaria dificultad e importancia se hayan evidenciado relevantes cualidades profesionales o cívicas. Sobresalir con perseverancia y notoriedad en el cumplimiento de los deberes de su empleo o cargo, de forma que constituya una conducta ejemplar digna que se resalte como mérito extraordinario. Realizar estudios profesionales o científicos, u otros hechos o trabajos sobresalientes, que supongan notable prestigio para el Cuerpo, o utilidad para el servicio oficialmente reconocido.
Fuente: BOE

Los demandantes cuentan con viento a favor de la jurisprudencia. Hace dos años, la misma Audiencia Nacional le dio la razón a un civil que, junto a un buzo del instituto armado, participó en un arriesgadísimo rescate que salvó la vida de un submarinista que quedó atrapado en una cavidad de Manacor (Mallorca). El civil fue reconocido con el distintivo blanco y el agente recibió la cruz roja, una diferencia de criterio que el Ministerio del Interior justificó con el argumento de que el guardia civil había dirigido la operación y que el buzo civil sólo fue un colaborador. La pionera sentencia concluyó que se trató de una decisión arbitraria y que la intervención de los dos rescatistas estuvo al mismo nivel, por lo que ordenó condecorarle con la cruz con distintivo rojo.

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