Tribunales

El alcalde de Nerja declara que desconocía el vertido ilegal en la cantera

José Alberto Armijo asegura haber actuado con total legalidad, que nunca hubo informes al respecto y que el vertedero era una realidad admitida por todos

José Alberto Armijo, alcalde de Nerja a su llegada a la Ciudad de la Justicia.

José Alberto Armijo, alcalde de Nerja a su llegada a la Ciudad de la Justicia. / Álex Zea

EFE

El alcalde de la localidad de Nerja, José Alberto Armijo (PP), ha asegurado en el juicio en el que está procesado que solo quisieron restaurar una cantera que había en el municipio y que desconocían que se estuviese utilizando como un vertedero ilegal.

El juicio ha comenzado este lunes en el Juzgado de lo Penal número 15 de Málaga y junto al regidor hay siete personas más sentadas en el banquillo de los acusados por el caso del vertedero ilegal en dicho municipio.

"Desconocía que hubiera un vertedero sin control", ha reiterado en numerosas ocasiones durante su declaración, y ha destacado que ellos autorizaron que en la cantera se echaran escombros para tapar "la enorme oquedad que había dejado el anterior explotador".

El regidor ha relatado que la mejor solución que pensaron era que se tapara con escombros y materiales inertes y así acabar con el problema que había y ha subrayado que "nunca" hubo ningún informe técnico ni jurídico que dijese que no era legal.

Ha destacado que los servicios jurídicos le informaron de que se iba a restaurar la cantera pero en ese momento desconocía si para echar los escombros había que tomar medidas, "eso lo debían saber los servicios jurídicos", al igual que tampoco sabía si se necesitaba autorización de la administración autonómica.

"Si los servicios jurídicos me hubieran dicho que se necesitaba un estudio de impacto ambiental, se hubiera hecho", ha afirmado el alcalde, al tiempo que ha subrayado que nadie se quejó o le advirtió de una posible ilegalidad.

El vertedero no ha sido nunca un problema, ha sido una realidad admitida y consentida por todos "por allí ha pasado todo el mundo", ha destacado Armijo, y ha advertido que el explotador de restaurar la cantera tampoco se quejó "los escombros nunca fueron un impedimento".

En ese sentido, ha insistido en que esos escombros "era un material necesario para restaurar el enorme boquete que había".

"Me gustaría saber en qué me equivocado en este asunto", se ha preguntado el regidor, y ha añadido que ha conocido hasta cinco delegados de medio ambiente y que ninguno le dijo que le preocupara este asunto.

Un momento del juicio por el vertedero ilegal de Nerja.

Un momento del juicio por el vertedero ilegal de Nerja. / Álex Zea

A preguntas del fiscal ha indicado que él no fue consciente de que la gente estuviese echando de todo y que cuando Seprona advirtió de que había que cesar con la actividad "nosotros le recomendamos que pusieran una cadena y cesaran la actividad", y así lo hicieron.

El fiscal, en el escrito acusatorio al que ha tenido acceso EFE, mantiene que fue el propio José Alberto Armijo, como alcalde en 1998, quien autorizó la explotación de esta antigua cantera, ubicada en el paraje del Río de la Miel, como vertedero.

La acusación pública mantiene que lo autorizó desoyendo reiteradamente los numerosos escritos que le advirtieron de la ilegalidad y peligrosidad de este vertedero ubicado en suelo de protección especial por sus valores naturales en las inmediaciones del río Chillar y el Parque Natural de Sierra de Tejeda, Almijara y Alhama.

El vertedero, que fue clausurado por orden de la Junta de Andalucía y del Seprona en septiembre de 2016 después de 16 años de funcionamiento, ocupaba 36.000 metros cuadrados en el espacio protegido del Parque Natural de la Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama.

La Fiscalía malagueña ha pedido que el alcalde y el resto de acusados sean condenados a dos años de prisión y 18 meses de inhabilitación especial para profesión u oficio, así como al pago de una multa de 7.200 euros.

Para las seis empresas encausadas por este mismo delito solicita multa de 18.250 euros.

Además se pide que todos ellos paguen solidariamente las obras para la restitución del paraje a su estado original, actuaciones inicialmente tasadas en torno a los 11.000.000 de euros.