Maltrato animal
Del infierno a Suecia: la nueva vida de Eli, la perra rescatada por la Policía Nacional
La podenca, tras una rápida recuperación en la Protectora de Animales de Málaga, ya vive con la familia nórdica que la ha adoptado. La Policía Nacional la encontró en una finca de la Axarquía desnutrida y con una profunda herida en el cuello, ya que estaba atada de forma que no podía tumbarse por completo
La Opinión
Eli, la perra rescatada por la Policía Nacional de una muerte segura en una finca de la Axarquía, ya se encuentra completamente recuperada y viviendo con una familia en Suecia. Así lo confirma la presidenta de la Sociedad Protectora de Animales de Málaga, Carmen Manzano, quien asegura que la podenca andaluza llegó a sus instalaciones con un importante estado caquéctico y una profunda herida en el cuello que le provocó la tensión de la cadena a la que siempre estaba atada y que le impedía tumbarse del todo.
El propietario, que tenía en su terreno otro perro muerto atado a un árbol, ha sido detenido
Manzano destaca la rapidez con la que Eli, que no tenía chip y fue nombrada así tras su rescate, se ha recuperado física y anímicamente. «Llegó en los huesos, con muchos parásitos y muy asustada, pero afortunadamente sin ninguna enfermedad grave. Nuestros voluntarios han hecho un gran trabajo y, como veis, la perra es otra», explica. En el vídeo facilitado por la Policía Nacional se puede apreciar cómo a un agente le cuesta ganarse la confianza de la perra. En la imagen que ilustra esta noticia, ya recuperada, perece sonreír a la cámara.
Completados los tratamientos y cuarentenas, Eli consiguió un nuevo hogar en Suecia gracias la colaboración con SOS Animals, entidad sueca a través de la cual la protectora malagueña podrá realizar un seguimiento de la podenca, tal y como hacen con todos los animales que consiguen dar en adopción.
Eli, antes de viajar a Suecia.
Un perro, conejos y gallinas muertos
La suerte que ha tenido Eli no la tuvo su compañero, un perro que los agentes de la Policía Nacional de Vélez-Málaga hallaron muerto cuando llegaron a la finca tras conocer que en la misma podía haber animales maltratados y muertos por inanición. Según la Comisaría Provincial, el cadáver estaba atado con una cadena a un árbol y en estado caquéctico, sin recipientes de comida ni agua.
Entonces encontraron a Eli, amarrada en la penumbra de una casa de aperos en la que también había conejos y gallinas muertos. El propietario de los animales fue detenido como presunto autor de dos delitos de maltrato animal en comisión por omisión, al no cumplir con las obligaciones básicas de alimentación, alojamiento y cuidado.
