No, la Unión Europea no va a prohibir los kebabs en el viejo continente. El Parlamento Europeo, a través de su cuenta oficial en Twitter, se ha visto obligada a desmentir una noticia falsa (fake news) que ha corrido como la pólvora en las redes sociales después de varios medios de comunicación reprodujesen una información asegurando que el organismo europeo prohibiría el popular plato por suponer un riesgo para la salud.

Concretamente, las noticias falsas publicadas la respecto hablaban de la presencia de una serie de aditivos que estarían presentes en la carne del popular plato de Medio Oriente. A día de hoy, tal como ha aclarado el organismo europeo, el uso generalizado de fosfatos está prohibido en todo el territorio de la Unión Europea. Se entienden, entonces, que los kebabs que se consumen hoy en el continente no ponen en riesgo la seguridad de los consumidores.

La información falsa que ha adquirido entidad de cierta en los tiempos de la posverdad, adelantaba un resultado engañoso de un dabate que llega al seno de la Eurocámara sobre la posibilidad de levantar el veto a algunos fosfatos como el ácido fosfórico, el difosfato, el trifosfato y el polifosfato (E338-452), ante la falta de evidencias científicas que vinculan estos aditivios a riesgos para la salud.

Sin embargo, lo que ha sucedido es que la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo (ENVI) se ha opuesto a esta posible legalización de los fosfatos echando mano de una serie de informes que sí los vinculan a enfermedades del corazón. Este veto a la propuesta ha salido adelante con 32 votos a favor y 22 en contra.

Así lo explicaba el Parlamento Europeo en su cuenta oficial de Twitter:

El informe de la comisión europea se debatirá en la Eurocámara a principios de diciembre y de raticarse, los fosfatos ya prohibidos seguirán estándolo. Por lo tanto, los fanáticos de los kebabas de pollo y cordero pueden respirar tranquilos porque su plato favorito seguirá sin suponer un riesgo para su salud. A día de hoy, todos ello están libres de fosfatos, por lo que no son un riesgo para la salud.

La portavoz de los socialdemócratas en el Parlamento Europeo, Christel Schaldemose, se mostró satisfecha por el voto en favor de una objeción al uso de fosfatos que, a su juicio, demuestra que la Eurocámara "se toma en serio la salud pública". La Autoridad Europea de Salud Alimentaria tiene previsto reevaluar la seguridad de los fosfatos en los aditivos alimentarios de aquí al 31 de diciembre de 2018.