De lo que llevamos de carnaval ya hay unos cuantos ofendidos por una u otra causa. Y lo que nos queda todavía porque se ofendan.

El carnaval se alimenta de la critica y yo no concibo este sin ella. Es verdad que cuando alguien tiene un hijo no le gusta que le digan que es muy feo, aunque tenga unas orejas que le llegan al suelo y tenga un ojo mirando para Albacete y otro para Cuenca. Esa criatura no tiene la culpa de ser horrenda pero para eso esta su padre, para protegerlo y salvaguardarlo de las críticas que le puedan llegar. Y lo defiende a capa y espada dando la vida por él si hace falta.

Las criticas duelen, a veces son sin razón ninguna y, aun te hace más daño. Pero otras tienen toda la razón del mundo y tú lo sabes.

Cuando la critica te llega a ti, o a algo tuyo sabiendo que no tiene razón y es por dar por saco, haces oídos sordos, no te paras ni un solo minuto a darle más importancia. Pero cuando en esa crítica hay algo de verdad y, digo algo por no decir toda, es cuando ya se te infla la vena de la cabeza. Porque tu creías que nadie se había dado cuenta de ese fallo. Te enfadas descargando tu ira contra aquel que hace la crítica, y lo veo licito también, donde las dan las toman. Los carnavaleros tenemos la piel muy fina. Ya le escribí alguna vez a esto.

Si no hubiera critica el carnaval sería lo que en muchos casos ya es. Papelillo, serpentina, mascarada y antifaz. Caramelo y mermelada que es lo que a algunos les gusta escuchar. Aunque cuando la crítica le cae a otro entonces el nota se pone pitoso y se le llena la boca diciendo: a eso es lo que hay que cantarle carajo, de eso es lo que hay que hablar en carnavales.

Ojalá no hubiese una sola letra o una crónica o un artículo criticando nada. Seria señal de que todo va maravillosamente bien en el mundo. Pero no es así. Por eso hay que criticar y, por eso siempre habrá ofendiditos.

Yo no me he tomado nunca un café con Momo, ni siquiera en sueños. Mas quisiera yo. Pero es una visión más de alguien que es carnavalero como tú, como yo y como todos los que amamos esta fiesta. Un abrazo a todos los ofendiditos de este carnaval.