Entre enero y mayo, los incendios forestales (6.132) han duplicado a los producidos entre ambos meses de 2007, según un informe presentado hoy por CCOO que recoge datos del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.

No obstante, la superficie y los incendios en lo que va de 2008 son inferiores a la media del último decenio, cuando se produjeron 6.493 siniestros y 27.000 hectáreas arrasadas.

"Este año vamos mal y podemos ir a peor", ha advertido el secretario confederal de Medio Ambiente y Salud Laboral de CCOO, Fernando Rodrigo, en conferencia de prensa.

Rodrigo ha señalado que las cuantiosas lluvias de esta primavera han originado un aumento de la biomasa, especialmente en las zonas de más riego de incendio y que si las temperaturas suben en las próximas semanas, se podría disparar el número de incendios.

Los responsables sindicales han denunciado que no se ha avanzado en prevención, que debería ser un eje fundamental de la estrategia de lucha contra los incendios forestales en las comunidades autónomas.

Ha destacado, sin embargo, que desde 2005 el número de efectivos que luchan contra los incendios ha aumentado en más de un treinta por ciento, hasta superar actualmente los 51.000 en temporada de máximo riesgo.

El responsable sindical ha criticado que la media de la superficie que estos trabajadores tienen que cubrir, unas 637 hectáreas, sigue siendo alta y que los avances han sido "enormemente" desiguales en las distintas autonomías.

Las proporción entre la superficie quemada durante los últimos tres años y el aumento de efectivos en 2008 ha sido más baja en Galicia y Canarias, que suspenden "sistemáticamente" en la lucha contra incendios, según Eva Hernández, del Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud del sindicato.

Tras estas dos comunidades, en cuanto a la peor respuesta a la evolución de los incendios se sitúan Cantabria y Asturias, según el informe, que considera también "insuficientes" los incrementos de efectivos en Extremadura, Castilla-La Mancha y Castilla y León.

La investigación de las causas de los incendios avanza muy lentamente, ha señalado Francisco Javier Cabezos, coordinador estatal de los agentes forestales de CCOO.

Castilla y León, Extremadura, Castilla-La Mancha y Cantabria "dilapidan" dinero público dejando la investigación de algunos de estos delitos en manos de empresas privadas y Madrid y Castilla-La Mancha ponen trabas a que los agentes forestales investiguen, ha señalado Cabezos.

El representante sindical ha denunciado que actualmente no se anotan en el Registro de la Propiedad las fincas incendiadas, tal y como prevé la Ley Estatal de Montes, algo imprescindible para garantizar que, como ordena la norma, no se pueda recalificar la propiedad en treinta años.