El barco "Mijaíl Sómov", al que le abrió paso el rompehielos "Artika", atracó a las 09.00 GMT en la plancha de hielo donde está desplegada la SP-35, integrada por veinte especialistas, dijo el científico a la agencia oficial rusa Itar-Tass.

El barco llegó con varias horas de retraso debido a la niebla en zona, junto al archipiélago noruego de Spitsbergen, donde se registra una temperatura de 0 grados centígrados.

La base flotante rusa está integrada por 28 vagones vivienda y laboratorio, y cuenta con generadores eléctricos, estaciones de radio, depósitos de combustible, tractores e, incluso, trineos tirados por perros.

Según Strugatski, se necesitarán tres días para cargar todas las instalaciones y equipos de la base a bordo del "Mijaíl Sómov"

El grupo científico, que encabeza Alexéi Visneski, está formado por especialistas en meteorología, química, biología, oceanografía, geofísica y glaciología, que estudian los fenómenos relacionados con los hielos árticos y la glaciación.

Las expediciones al Ártico desde las costas rusas se remontan a junio de 1937, cuando cuatro expedicionarios soviéticos encabezados por el científico Iván Papanin permanecieron siete meses en tiendas de campaña sobre el hielo a la deriva.

Desde el momento del desembarco de la SP-35, el 21 de septiembre del año pasado, la plancha de hielo en la que se encuentra ha recorrido más de 2.500 kilómetros empujada por el viento, las corrientes marinas, mareas y otros factores.