Así lo ha explicado en rueda de prensa el coautor del informe "La crisis del clima. Evidencias del cambio climático en España" Jesús Martínez Linares, que ha dicho que este proceso afecta a la agricultura andaluza de manera "directa", ya que disminuyen los recursos hídricos.

Esto haría disminuir la capacidad productiva de los secanos y pastos; aumentaría la vulnerabilidad de los frutales por el adelanto de la floración; los suelos serían más vulnerables a la salificación y habría mayor incidencia de plagas agrícolas.

El investigador de la Universidad de Sevilla se ha mostrado preocupado por el impacto que el cambio climático puede producir en la salud humana, "no sólo por los aumentos de las alergias y las enfermedades cardíacas o el aumento de la morbilidad producido por las temperaturas extremas", sino también por "el riesgo de aparición de nuevos vectores de enfermedades parasitarias infecciosas, como el mosquito tigre que ha sido encontrado en diversas zonas de España y que podría transmitir brotes foráneos de malaria".

Respecto al turismo, Aida Vila, responsable de Cambio Climático de la organización, ha planteado que "el aumento de las temperaturas y la proliferación de los fenómenos meteorológicos extremos ha creado una disminución del turismo", por lo que el cambio climático en Andalucía "no sólo está afectando a los ecosistemas sino también a los sistemas productivos".

Vila ha pedido que el Gobierno que apueste por la reducción interna de emisiones y ha criticado que España "genera más del doble de las emisiones a las que se comprometió en Kioto y basa su cumplimiento del Protocolo en la compra de derechos de emisión por valor de unos 3.000 millones de euros".