El concejal no adscrito del Ayuntamiento de Fuengirola, Antonio Castillo, aclaró ayer que su decisión de abandonar el grupo municipal socialista no obedece a razones económicas.

Castillo, avalado por fuentes municipales, añadió que desde 2007 hasta mayo de este año no se benefició de la media liberación de la que gozaba el PSOE por poseer un grupo propio en la corporación local.

«Nunca he cobrado nada por ser edil de Fuengirola. Yo me he dedicado siempre a la política de forma altruista», dijo Antonio Castillo. En cuanto a sus razones para abandonar el grupo municipal socialista, reiteró que las ofrecerá públicamente en unos días, posiblemente la próxima semana en rueda de prensa.

Castillo entró a formar parte del grupo municipal socialista fuengiroleño en el año 2007 y se presentó, con las mismas siglas, en los últimos comicios locales de 2011 en el puesto cuarto de la lista de la formación.

El PSOE local le pide que en vez de ir al grupo no adscrito entregue el acta de concejal, ya que fue elegido a través del partido.