El juicio sobre el asesinato de Jenna Lepomäki en Mijas sigue aportando datos reveladores justo cuando se cumple un año de que la joven finesa aterrizara en Málaga invitada por sus presuntos asesinos. El crimen se consumó una semana después. Los investigadores afirman ahora que los dos acusados, también finlandeses de 19 y 21 años, intentaron atraer al menos a otras siete mujeres a la Costa del Sol para que colaboraran con ellos en sus oscuros negocios. Esos contactos solían realizarse a través de Facebook, pero sólo fructificaron con Jenna, de 18 años, a la que uno de los acusados conoció años atrás en Kurikka, al suroeste de Tampere.

Según el fiscal del tribunal de Pirkanmaa, el viaje se cerró después de que los jóvenes le pagaran el billete de avión. Ella llegó a la Costa del Sol el 20 de junio sin dinero, por lo que dependía completamente de sus anfitriones, que estaban instalados en la casa en la que la madre de uno de ellos vivía en Mijas con su pareja. La investigación preliminar apunta a que una de las opciones que los tres jóvenes estudiaron era que la chica se prostituyera en la Costa del Sol, algo con lo que ella podría haber estado de acuerdo y que incluso pudo provocar contactos con un proxeneta, aspecto que la familia de la chica rechaza de plano. La opción no maduró y los jóvenes se centraron en el plan de usar a Jenna como mula, es decir, que transportara cocaína en sus intestinos desde Málaga a Finlandia.

De nuevo, una de las conclusiones es que ella estaba de acuerdo, pero dudó tras conocer los riesgos. El no definitivo de Jenna a viajar con las drogas lo comunicó el día 26, desencadenando la ira de los jóvenes hasta el punto de que uno de ellos la amenazó con un palo y un cuchillo. Este momento es para el fiscal «el punto de inflexión en los hechos». Al día siguiente, el 27 de junio, los dos jóvenes fueron a Fuengirola para comprar preservativos con los que envolver la droga. Fue cuando Jenna aprovechó para llamar a tres servicios de emergencia españoles diferentes en 13 ocasiones.

Dice el fiscal que las comunicaciones fueron lingüísticamente complicadas, aunque la angustia y la preocupación de la joven eran evidentes. Jenna decidió entonces ir andando hasta el cuartel de la Guardia Civil de Mijas para denunciar las amenazas y el hecho de que los chicos le hubiesen quitado el pasaporte. Al llegar a casa, los acusados recibieron una llamada del cuartel para ser interrogados. Durante su exposición, el fiscal destacó el hecho de que la entrevista se hizo sin traductores. El más joven chapurreó el castellano y tradujo la versión de su compañero, negando ambos las amenazas sobre la chica.

Según la versión acusatoria, los presuntos homicidas devolvieron el pasaporte a Jenna y se marcharon a casa muy enfadados. La Guardia Civil hizo los trámites para que Lepomäki pasara la noche en un hostal de Mijas. El plan era que al día siguiente fuera a la embajada de Finlandia para iniciar los trámites de regreso a su país, pero antes de eso se pasó por la vivienda en la que hasta entonces había sido una invitada. Ese fue su final. Llegó a medianoche y se negó a dar detalles de su declaración ante los agentes del instituto armado.

El acusado más joven, que afirma que estaba borracho aquella noche, perdió el control y la apuñaló, tal y como adelantó La Opinión de Málaga el 24 de octubre del año pasado. Luego la estranguló en el cuarto de baño. Durante el juicio se ha detallado que los jóvenes se acostaron tras el crimen y fue al día siguiente cuando trabajaron con el cadáver. Lo intentaron descuartizar y quemar, pero finalmente lo abandonaron el 1 de julio en un saco de dormir bajo una hojarasca cercana a la casa.

El 5 de julio huyeron a Irlanda, donde trazaron una serie de coartadas, como enviarle SMS y escribir a Jenna en su muro de Facebook aún sabiendo que estaba muerta, así como decir que ella desapareció el día 3 de julio. A mediados de mes, volvieron por separado a Finlandia, donde la policía no les quitó ojo hasta que las escuchas telefónicas llevaron a los agentes hasta la finca de Mijas. El cadáver de Jenna fue encontrado el 6 de octubre.