­Las obras de peatonalización de la plaza Virgen de la Peña de Mijas ponen los focos de nuevo en un municipio que ha vivido un verano especialmente agitado en el terreno político, con serias diferencias entre los dos socios que gobiernan: Ciudadanos y PP. Ahora también se viven posturas diferentes, según el grupo municipal interlocutor, acerca del millar de personas que han prestado su firma para intentar paralizar unos trabajos que tienen fecha de inicio: mañana lunes.

La polémica está servida desde el lunes pasado. El Consistorio le mostraba a vecinos y empresarios los detalles técnicos de la remodelación que suprimirá los más de 70 aparcamientos en superficie y parte de la vegetación existente en la actualidad. De inmediato, pese a que el proyecto está licitado y adjudicado desde finales del anterior mandato, entonces con el PP en el gobierno con mayoría absoluta, un grupo de afectados por estas obras puso en marcha una plataforma contraria a la eliminación de todas esas plazas para estacionar.

En un plazo de 24 horas se recogía casi un millar de firmas y este pasado viernes se presentaban en el registro municipal. El alcalde mijeño, Juan Carlos Maldonado (C´s), modificaba su agenda y recibía a última hora a los portavoces de dicha plataforma vecinal. Uno de ellos, Pedro Moreno, manifestaba a la conclusión de dicho encuentro: «El Ayuntamiento ya sabe que el pueblo está dispuesto a hacer lo que haga falta para que no se quite ni un sólo aparcamiento».

Y agregaba: «Nos han dicho que se empezarán mañana lunes por quitar parte del acerado, de manera que no vamos a interferir con las obras. Así le daremos tiempo al concejal de Obras e Infraestructuras, José Carlos Martín, para que en Málaga intente llegar a un acuerdo con el Consorcio Qualifica, que es el que ha licitado el proyecto. Pero si llega el martes y en la nueva reunión que tenemos acordada no se nos atienda, no descartamos ningún tipo de medida».

Es un aviso para navegantes. Para Ciudadanos, formación a la que también pertenece el propio Martín, «lo extraño es que el Partido Popular no consensuara las obras en el anterior mandato y ahora se esconda».

Pero el PP niega esas acusaciones que parten de sus propios socios de gobierno: «El proyecto se consensuó con los vecinos, con los empresarios. Hasta los plazos están negociados». El concejal Mario Bravo, que ya formó parte del anterior gobierno, recuerda que en las inmediaciones de la plaza existe un gran aparcamiento público en el que poder dejar el vehículo estacionado durante un máximo de 24 horas por apenas un euro.

Según fuentes de Ciudadanos, la ciudadanía se ha acostumbrado a aparcar en la puerta de casa y sin tener que desembolsar ni un céntimo, por lo que comprenden estas protestas. El PP, al respecto, incide en que estas quejas se dieron ya en Fuengirola o Málaga, donde «peatonalizar fue un éxito».