­La demolición de un céntrico edifico de Estepona en una parcela donde se construirá el futuro hotel Maravillas ha traído consigo una sorpresa: el hallazgo de los restos de la tenería medieval mejor conservada de toda la Península Ibérica. El conjunto de elementos encontrados data de los siglos XI y XII y se compone de cinco piletas redondas y cuatro rectangulares que eran utilizadas por los curtidores para el tratamiento de pieles y cuero.

El edil de Patrimonio Histórico, José María Guerrero, explicó ayer que los restos se encuentran en un «buenísimo estado de conservación, lo que lo convierte en uno de los hallazgos, dentro de esta tipología, más importantes de la Península Ibérica».

Por otro lado, el arqueólogo municipal, Ildefonso Navarro, apuntó que también ha aparecido un horno de cocción cerámica del siglo XIV que «con total seguridad pertenecía a un taller de alfarería de la época».

Los trabajos de recuperación se han llevado a cabo durante ocho semanas por una empresa especializada, Arqueotectura, cuya representante, Toñi Martín, destacó el buen estado de conservación de los restos, a pesar de que el nivel freático es muy alto y las condiciones para desenterrar el yacimiento han sido complicadas por las filtraciones de agua.

Guerrero adelantó que este yacimiento arqueológico «será el primero que se musealizará en la ciudad dentro del propio edificio del hotel Maravillas». En este sentido, informó de que el arquitecto está modificando el proyecto del complejo de descanso para que los restos puedan visitarse dentro de las instalaciones. Para ello, se colocará un suelo de cristal en la zona del restaurante, donde se podrán contemplar algunas de las piletas del hallazgo.

El concejal destacó a su vez que se trata de «un hito histórico para el patrimonio y la cultura de la ciudad, reivindicando su importancia y la singularidad de nuestra historia».

El hallazgo de esta tenería industrial se encuentra en los extramuros de lo que en su día fue la ciudad de Estebbuna y cerca del río Calancha y el mar.