El Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Histórico de Mijas Pueblo (PEPRI) entrará en vigor el próximo mes de octubre tras su aprobación definitiva en el pleno de septiembre que aún debe desarrollarse. La Junta de Gobierno Local dio ayer el visto bueno a este documento, que fija los criterios para el mantenimiento y el desarrollo del conjunto histórico artístico de la localidad y que, además, abre así el núcleo urbano al pequeño y mediano comercio.

El documento establece unas normas sobre la utilización de espacios públicos como pueden ser calles, plazas y jardines. Esto va a permitir que, a partir de ahora, para llevar a cabo una reforma los vecinos no tengan que realizar el trámite ante la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, ya que la concesión de licencias de obras será competencia del Consistorio. «El plan ofrece mayor comodidad a los vecinos del pueblo al reducir la burocracia en cada actuación urbanística y, a su vez, servirá para garantizar la protección del casco histórico», señaló el edil de Urbanismo, Andrés Ruiz.

Además, la idea del PEPRI es impulsar el comercio para darle un mayor atractivo turístico a la localidad. «No queremos dejar a Mijas Pueblo como una zona meramente residencial, sino que respetando su idiosincrasia y la estructura que tiene, facilitar la implantación de negocios que dinamicen la economía local de forma homogénea», aseguró el concejal.

El PEPRI afectará a una superficie de 27.000 hectáreas, 2.791 metros lineales y 8.000 habitantes. Se trata de un documento en el que los ciudadanos han cobrado especial protagonismo a la hora de confeccionarlo, ya que el Ayuntamiento ha contado con ellos en todo momento.

«Una vez que pongamos en marcha este plan tendremos la herramienta fundamental para salvaguardar la arquitectura propia de pueblo andaluz de Mijas sin que esto suponga un problema para el desarrollo de diferentes negocios que se encajen en el entorno», concluyó Ruiz.