El Ayuntamiento de Benalmádena aprobó ayer en sesión plenaria varias modificaciones en el pago de las tasas de alcantarillado y saneamiento para el próximo año, de manera que por ejemplo las viviendas con pozo pasarán a contribuir conforme a lo que consuman, en vez de tener una tarifa plana.

Pero hay otras muchas novedades, tal y como expresó el concejal y al mismo tiempo consejero-delegado de la empresa pública de aguas Emabesa, Joaquín Villazón: «En la subida del IPC, que tenemos que aplicar a la tarifa de agua potable conforme a lo recogido en el pliego, hemos aplicado también el IPC negativo para paliar el incremento. O vamos a aplicar una tasa inferior a los hoteles con un gran número de camas como estrategia para incentivar que permanezcan abiertos durante todo el año».

El Consistorio indicó que se ha abierto la posibilidad de introducir un contador en los pozos de las casas «no conectadas a la red de Emabesa» para que la tasa que las mismas abonan en concepto del alcantarillado «deje de ser una tarifa fija por vivienda y se pueda también abonar conforme al consumo de agua potable a partir del próximo año», finalizó Villazón. Y también recordó el Ayuntamiento que Emabesa destinó durante el año 2016 más de 1,8 millones en renovar las redes de agua potable.