El Parlamento Andaluz ha aprobado este martes por la mañana en la Comisión de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio la propuesta del grupo parlamentario de Izquierda Unida LV-CA para declarar al Castaño Santo de Istán Monumento Natural de Andalucía.

El responsable de defender la Proposición No de Ley ha sido el parlamentario malagueño José Antonio Castro que en las exposiciones ha subrayado "que el Castaño Santo de Istán es un ser singularmente longevo, un ser vivo extraordinario testigo del paso de la historia bajo sus ramas desde hace más de 800 años".

Los datos técnicos de su porte y dimensiones son extraordinarios, con un perímetro de tronco a 1,30 metros del suelo de 15 metros, mientras que en la base se alcanzan casi los 22 metros de diámetro y con una copa muy considerable cerca de los 540 metros cuadrados de sombra.

"Dadas sus características singulares, desde Izquierda Unida nos vemos impelidos a solicitar su inclusión en el catálogo de Monumentos Naturales de Andalucía para fortalecer su protección y trabajar por prolongar su longeva vida, y hacerlo de manera urgente porque son varios los peligros que lo amenazan", ha señalado Castro.

"El Parlamento Andaluz tiene hoy, la obligación legal y moral de ser la mejor garantía de conservación, para que las generaciones de andaluces y españoles por venir, gocen del patrimonio natural más rico en especies y biotopos de la Península Ibérica", ha enfatizado Castro.

"Izquierda Unida quiere sumar valores con esta proposición. Sumar valores naturales, turísticos, medioambientales y simbólicos. No podemos darle la espalda al Castaño Santo y por eso tenemos la obligación de protegerlo", ha incidido Castro.

Y es que al Castaño Santo lo acechan varias y graves amenazas, que ponen en peligro su dilatada existencia. Las enfermedades y achaques propios de un ser vivo de más de 800 años, se han agravado debido al olvido y al abandono a que ha sido objeto en los últimos años, por parte de sus propietarios y las administraciones públicas.

La última amenaza y quizás la más inquietante, es el ataque de la avispilla del castaño, que ya ha infectado el árbol, igual que lo ha hecho en otras masas de castaños en la provincia de Málaga.

También resulta preocupante la pérdida de tierra en sus alrededores dejando sus raíces al descubierto, en muchas ocasiones provocada por los visitantes que se la llevan dado su carácter simbólico y mágico. El rellano donde se ubica forma parte de una ladera con orientación este, y para evitar que la erosión descalce más las raíces de este increíble árbol, el Ayuntamiento de Istán y voluntarios construyeron hace unos años un murete de piedras detrás de él, aunque no ha sido suficiente para detener su deterioro y la erosión del entorno.