El 18 de junio abrirá sus puertas en Estepona un mercado delicatessen que dará una nueva vida al antiguo Mercado de Abastos situado en el corazón del casco urbano, concretamente, en la calle Villa, bajo la dirección gastronómica del cocinero César Cabal.
El Mercado de San Luiscuenta con 19 puestos de los cuales ya se han alquilado 12 y por sus modernas instalaciones, muy próximas a la torre del Reloj, se espera que pasen cada día entre 400 y 500 personas.
«Es un mercado gourmet evolucionado porque tiene alma de restaurante», explica César Cabal. «Nos hemos dado cuenta de que a la gente le supone una incomodidad tener que acercarse a los puestos a pedir y luego buscar mesa para sentarse. Por ello, tendremos un grupo de maitres y de camareros que servirán a los clientes productos de cualquiera de los locales».
Productos
¿Qué se podrá degustar en el Mercado de San Luis? Desde las prestigiosas ostras Amelie, hasta jamones de la firma Encinares del Sur, del Valle de los Pedroches, elegido mejor jamón de bellota ibérico de España, pasando por los exquisitos jamones Carrasco de Guijuelo, que atesoran ya cuatro generaciones deleitando a los mejores paladares, hasta el mejor marisco y pescado de las lonjas malagueñas, pasando por la carne hecha en una parrilla de leña.
«También tendremos una arrocería y la mejor cocina japonesa de la mano del asesor David Juárez», quien pese a ser mexicano, pasó diez años aprendiendo cocina japonesa de la mano del maestro Toshio Hirayama del restaurantes Suntory y lleva 30 años elaborando comida nipona.
Con una gran terraza, el Mercado de San Luis de Estepona tendrá una zona de cervecería con dos tanques de 5.000 litros de la malagueña Cerveza Victoria, otra zona de coctelería con las mejores bebidas espirituosas y una zona de vinoteca.
El Mercado de San Luis debe su nombre por su proximidad al castillo del siglo XVI del mismo nombre. Las obras de rehabilitación de las instalaciones del antiguo Mercado de Abastos han seguido las especificaciones de los técnicos municipales para adecuarlo al entorno.
De esta manera, el inmueble no excede la altura que tenía el antiguo mercado por su proximidad a la torre del Reloj, que es un Bien de Interés Cultural (BIC) del municipio. Además, el edificio conservará todos los elementos de la edificación actual que tienen interés tradicional o histórico. La concesionaria explotará el mercado por un plazo de 20 años y pagará al Consistorio un total de 1,7 millones de euros en concepto de canon.
