La curva de la Cala de Mijas, situada en este término municipal, ha registrado un total de 36 accidentes con víctimas en los últimos seis años, según datos aportados por el Gobierno central al diputado socialista Miguel Ángel Heredia, quien exigió ayer más inversiones para acabar con los puntos negros en las carreteras de la provincia. Así, Heredia lamentó el «elevado» número de accidentes con víctimas en esta curva mijeña, considerado uno de los puntos «más peligrosos de la provincia», situado entre los puntos kilométricos 199 y 202 de la autovía A-7.

Heredia incidió en que es «fundamental» que el Gobierno del PP destine más dinero para eliminar estos puntos. Además, reclamó a Ciudadanos que se sume a su petición, asegurando que «su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado deja claro que comparte la nula inversión que está haciendo Rajoy en materia de carreteras» en la provincia malagueña.

El parlamentario del PSOE exigió inversiones concretas «para corregir y solucionar este punto negro, actuaciones que deben pasar por la mejora del trazado o cualquier otra propuesta técnica, unido a la necesidad de apertura de la autopista de peaje en caso de accidente». «Si hay un accidente y se corta la autovía por completo se queda cortada la principal vía de conexión de la Costa del Sol, por lo que se precisa una vía alternativa», explicó.

Al tiempo, Heredia mostró su preocupación por el «fuerte incremento» en el número de víctimas mortales en accidentes de tráfico en la provincia en 2017; de ahí que urja a acometer «medidas inmediatas» para reducirlas y «más inversiones en mejorar carreteras e instalar radares en puntos negros».

El aumento de muertes el pasado año, aseguró, ha sido ocho veces mayor que el de la media nacional. Así, cifró en 39 las personas que perdieron la vida en accidentes de tráfico en las carreteras de la provincia en 2017, ocho más que en 2016, lo que representa un incremento del 26%.

«Este aumento es brutal si lo comparamos con el aumento nacional que ha sido del 3,3%», manifestó, y añadió que, con estos datos, el año 2017 se alza como el peor desde 2010 en las carreteras malagueñas.