Benalmádena ha rendido este sábado un emotivo homenaje a "La Niña de Benalmádena", una escultura que nació de las manos y la mente de Jaime Pimentel en 1968 y de cuya instalación en la Plaza de España de Benalmádena-Pueblo Nuevo se cumple ahora medio siglo. Al acto han acudido el artista, acompañado de sus familiares y amigos, así como el alcalde de la localidad, Víctor Navas, y el consejero de Empleo, Javier Carnero.

En el acto, se ha descubierto una placa que conmemora la efemérides y que califica de símbolo de la ciudad a esta escultura, que con el andar de los años se ha convertido en un icono identitario de los vecinos y vecinas del pueblo, cincuenta años en los que Benalmádena se ha convertido en un destino turístico de referencia internacional.

También se ha reivindicado la figura de Jaime Pimentel. De hecho, su trayectoria es ejemplar y muy vinculada a la provincia, ya que además de "La Niña de Benalmádena" es el autor de la escultura de "El Cenachero" o el burrito "Platero" del Paseo del Parque, donde todos los niños malagueños de varias generaciones se han fotografiado alguna vez. Por tanto, durante el homenaje se ha destacado por los oradores la vinculación de Pimentel con Benalmádena y de su obra como elemento dinamizador del pueblo.

La Benalmádena de hoy no es la de hace cincuenta años: entonces se trataba de un pequeño municipio que vivía básicamente de su actividad agrícola, pero entonces llegó el boom turístico de la localidad y su indudable liderazgo en el sector.