La Policía Local de Benalmádena ha cursado durante los meses de junio y julio un total de 168 sanciones por incumplimiento de las ordenanzas municipales, según lo detalló ayer el concejal de Seguridad, Javier Marín.

Este año las infracciones por convivencia ciudadana vuelven a ser las más frecuentes, con un total de 46 entre los meses de junio y julio. Esta sanciones recogen aspectos como depositar basura, muebles y podas fuera del horario establecido para ello o fuera de los contenedores. Asimismo, incluyen los excesos de ruido en la vivienda.

Por su parte, las infracciones relativas a Ocupación de Vía Pública, Aperturas y Urbanismo serían las segundas más frecuentes, con 22 denuncias en total en cada apartado durante junio y julio. Y en tercer lugar se encontrarían las sanciones relacionadas con animales. En este apartado se han contabilizado un total de 19 durante los dos meses.

«Las sanciones han tenido un descenso significativo respecto al año anterior», aseguró el edil detallando que «especialmente en julio, cuando pasamos de las 121 de 2017 a 73 este año, y en junio de 105 en 2017 a 95 este año». Así de las 226 infracciones que la Policía Local de Benalmádena cursó el pasado verano, este año ha cursado 168.

Por otro lado, Marín agradeció el trabajo desarrollado por la Unidad Delta, encargada de velar por el cumplimiento de las ordenanzas municipales con el apoyo del resto de agentes de la Policía Local.

Se trata de «una labor eminentemente informativa acerca del contenido de las ordenanzas», indicó el edil de Seguridad, asegurando que «el levantamiento de actas y multa posterior es el último recurso».

Durante el periodo estival, explicó Javier Marín, desde la Policía Local se incrementan los esfuerzos por velar por el cumplimiento de las ordenanzas, debido, por un lado, al «drástico» incremento de la población y, por otro, «a la importancia de cuidar cada aspecto y detalle que pueda afectar a la imagen que ofrecemos al visitante», puso en valor el concejal.

Por todo ello, señaló que es «importante que todos colaboremos en el cumplimiento de las normas y ordenanzas para ofrecer la mejor imagen posible», e insistió en que se trata, además, de «un elemento esencial para lograr la fidelización del turista».