La renuncia de Esperanza Oña a ser alcaldesa, en noviembre de 2014, para cumplir con la Ley Electoral en Andalucía y poder continuar como parlamentaria regional, dio paso a un gobierno del PP liderado por su mano derecha en el Ayuntamiento, Ana Mula. En los comicios de 2015, la nueva regidora revalidó su mayoría absoluta, frente a la caída de votos que el Partido Popular experimentó en muchos municipios de la provincia. Hoy, casi cuatro años después, la regidora se presenta oficialmente como candidata para 2019.

Usted fija el día de hoy como el kilómetro 0 de aquí a los comicios municipales de 2019. Restan meses de mandato, pero seguro que es momento de hacer balance de lo que ha sido su labor.

En efecto, iniciamos aquí un camino que nos conduce a las elecciones municipales que se celebrarán el domingo 26 de mayo. Espero y confío en revalidar y volver a contar con la confianza del municipio fuengiroleño. Ante todo tenemos como gran objetivo seguir trabajando. Hemos hecho durante estos cuatro años un gran trabajo a todos los niveles. Hemos trabajado por la ciudad, por y para el futuro de la ciudad. Pero todos sabemos que siempre quedan proyectos pendientes.

En pleno debate ciudadano en relación a los gobiernos de concentración de muchos municipios costasoleños, ¿qué les dirá a los fuengiroleños acerca de la mayoría absoluta que le otorgaron a ustedes y que esperan revalidar el próximo año?

Sobre todo les diremos que un gobierno estable y responsable es preferible al no tener que rendir cuentas más que a los ciudadanos. Es preferible porque evitar en todo momento ser chantajeado; y porque da una estabilidad y una seguridad a ciudadanos, empresarios e inversores. Enfrente vemos lo que suponen los gobiernos formados por la concentración de distintas fuerzas. Por mucho que quieran decir lo contrario, no tienen libertad de movimiento. Están sometidos al chantaje continuo, si quieres que otro grupo te apoye. Esto lo estamos viviendo muy cerca y la ciudadanía es consciente de lo que es porque lo hemos vivido aquí en Fuengirola. Siempre voy a defender que gobierne el partido que tiene la mayoría. Y tenemos que trabajar en ese sentido. Una ciudad no puede depender del acuerdo de hasta cinco partidos.

¿Es Fuengirola un ejemplo de gestión cuando durante años se ha hablado de que los ayuntamientos no deben depender del ladrillo para cuadrar sus números? El suelo urbanizable es muy reducido en su término.

Quedan zonas por urbanizar en nuestro municipio, en el entorno de Los Pacos o de Carvajal. Y además continuamente se están haciendo obras de reforma en pleno casco urbano. Pero es cierto que el Consistorio no ha dependido durante décadas del urbanismo, tal y como ha ocurrido en localidades cercanas. Un municipio no debe basar su gestión en el urbanismo. Sí que somos ejemplo al potenciar actividades como el turismo o el comercio. Hay que prestar mucha atención al tejido empresarial. Lo tenemos claro y vamos a seguir invirtiendo en la ciudad. El empresariado es el motor de creación de empleo y eso al final resuelve el destino de una ciudad. Y máxime ahora con esas limitaciones que tenemos las administraciones locales respecto a los gastos. Por muchos ingresos que tengamos, podemos gastar lo que podemos gastar. En base a la legislación actual, consideramos que debería modificarse el techo de gasto en caso de municipios de mayor población y arcas saneadas, como es el caso de nuestro ayuntamiento.

¿Por qué considera que esos inversores de los que presumen les han elegido, más allá de esa estabilidad política a la que se ha referido al principio?

Tenemos una trayectoria que nos permite seguir desarrollando actividades acordes siempre al comercio. Escuchamos mucho a los empresarios. Siempre las iniciativas las hacemos con el consenso de ellos. No tiene sentido organizar una actividad sin la colaboración privada. Así les transmitimos a los empresarios, constantemente, que nos propongan ideas. Eso funciona en Fuengirola y cada día nos aportan nuevas iniciativas.

¿Qué proyectos que no dependen del Consistorio en exclusiva se quedarán sin ejecutar?

Uno de los que más nos duele es el relativo a nuestras instalaciones portuarias. Nos ha afectado esa lucha entre los partidarios de Susana Díaz y los de Pedro Sánchez. Hubo cambios por las primarias socialistas en varias consejerías y nos afectó en ese avance que habíamos realizado en relación al puerto. Ahora se han retomado los contactos, pero se ha perdido más de un año. Pero también hay que remarcar el retraso en el centro de salud para Los Pacos, que la Junta de Andalucía no ha querido poner en marcha, ya que el Hospital Costa del Sol de Marbella no es pretexto al seguir parado. Y también seguiré reivindicando el hospital para Fuengirola y Mijas. La Junta lo primero que tiene que hacer es decir si quieren un hospital aquí y si los terrenos son idóneos. Asimismo, seguimos a la espera de una sede judicial digna y, en cuanto al Gobierno central, también demandamos una nueva comisaría.

Precisamente reivindica usted este proyecto en compañía del alcalde de Mijas, Juan Carlos Maldonado, que pertenece a Cs. ¿Qué opina de ese posible adelanto electoral en Andalucía forzado por ese partido?

No comprendo la postura de Cs. Los incumplimientos de un socio se ve desde el minuto 1. Se ven en el primer año, en el segundo o en el tercero. Han estado apoyando al gobierno de Susana Díaz y son corresponsables de todo.

Háblenos también de las iniciativas culminadas, de las que más satisfecha se encuentre.

Especialmente de la cuarta fase del paseo marítimo, de que sea una realidad. Era una obra bastante demandada y fue derribada por el Gobierno de Zapatero. Rajoy antes de ser presidente se comprometió en Fuengirola a hacerlo realidad. Como es una realidad la implicación de la Diputación, al fin, con nuestro municipio.